Los celos y una vida llena de dificultades llevaron a Daniel El Guatemala, a matar a tres sujetos que querian sobrepasarse con Jessy, su novia. Daniel les quitó las orejas y las manos y le arrancó el corazón a uno de ellos “para que no sintiera nada”.
Daniel declaró haberse comido el corazón del tercero, sin embargo, las autoridades dijeron que el órgano se deterioró por la fauna del lugar.
Según la reconstrucción que el periódico Excélsior hizo con base a los expedientes, confundida y con miedo, Jessy fue llevada al Ministerio Público la noche del 28 de julio para ser cuestionada respecto a lo ocurrido. La joven prefería no contestar, ya que sabía que confesar todo implicaría no ver más a Daniel y regresar con su madre a Xochimilco, donde tendría prohibido salir con sus amigos.
“Mató a los tres porque querían sobrepasarse conmigo. Siempre me protegía y por eso me fui a vivir con él”, declaró finalmente Jessy.
Los cadáveres fueron descubiertos por un vecino que avisó a la patrulla que circulaba ese día por el barrio de Santa Martha, en la delegación Milpa Alta.
Dos días antes de lo ocurrido el Rocky le dijo a Daniel ” me gusta la jessy y me la voy a chignar”, a lo que Daniel no pudo contener el enojo y junto con su amigo y complice El Oreo llevo la masacre a cabo.
“Lo maté por quererme quitar a mi Jessy. Le di un chingo de piquetes y un rocazo”, confesó Daniel una vez detenido.
Otro de los hombres asesinados fue un supuesto borracho que la miraba fijamente y el tercero fue El Flaquito, uno de sus amigos que se metió a la vivienda de Daniel mientras Jessy se cambiaba de ropa.
Al supuesto borracho, identificado como Máximo Olvera Vergara, y El Flaquito, Vicente Arturo Cortés Celis, les amputó las manos y las orejas.
Luego de la detención, las autoridades no pudieron encontrar registros sobre Daniel, a lo que este aseguró que vivía en Tapachula, donde sus padres lo vendieron a uno de sus tíos por 200 pesos.
El joven tenía cicatrices por todo el cuerpo debido a los golpes con un machete y un martillo a los que lo sometía su tio antes de que este pudiera escapar y vivir por su cuenta con Jessy.
Daniel ahora se encuentra en un reclusorio para menores bajo proceso penal por el delito de homicidio y podría alcanzar una sentencia de cinco años de prisón.
El paradero de Jessy ahora es desconocido puesto que fue enviada de vuelta a casa de su madre, de la cual se volvió a escapar.