Noticias de Yucatán
Tres suicidios más ocurrieron en Yucatán en la últimas horas: uno se trató de un turista regiomontano que se quitó la vida en la madrugada del lunes en una cabaña de un hotel en Dzilam de Bravo;otro en la comisaría meridana de Molas, donde un hombre se ahorcó en su domicilio, y el tercero, en Progreso, donde un septuagenario también se colgó.
Sobre los hechos ocurridos en Dzilam de Bravo, se informó que una pareja de turistas de Nuevo León llegó a ese puerto del noreste del Estado y se hospedó en un hotel en la playa conocida como “Perla Escondida”.
Alrededor de la una de madrugada, la pareja comenzó a discutir en la cabaña que ocupaban y en un momento dado la fémina salió y se dirigió a la playa, dejando solo a su marido, Gerardo Treviño R., de 35 años de edad.
Unas dos horas después, la mujer regresó a la cabaña, pensando que su esposo ya se había dormido, pero lo halló ahorcado en uno de los troncos de la fachada del cuarto, por lo que a gritos solicitó auxilio al personal del hotel.
Con la ayuda de otros huéspedes y empleados del hotel descolgaron el cuerpo, sin embargo, cuando llegaron paramédicos de la Secretaría de Seguridad Pública sólo pudieron confirmar que el individuo había muerto.
Posteriormente se presentó personal del Ministerio Público y Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado para realizar las diligencias legales.
Otros dos casos
El segundo caso ocurrió en la comisaría meridana de Molas, donde Filiberto Simá Canché, de 53 años de edad, se quitó la vida por medio del ahorcamiento en su habitación y sus familiares se dieron cuenta de los hechos casi un día después.
Alrededor de las 11 de la noche del sábado, Filberto, quien se encontraba en estado de ebriedad, llegó a su casa, en la calle 16 entre 19 y 21 de Molas, y se fue directamente a su habitación.
Fue hasta cerca de las 8 de la noche del domingo, cuando sus familiares fueron a buscarlo debido a que en todo el día no había salido de su cuarto, lo encontraron ahorcado en un hamaquero.
Autoridades judiciales llegaron a tomar conocimiento de los hechos y realizar las diligencias legales.
Mientras, en Progreso, Raúl González, de 70 años de edad, decidió privarse de la existencia ahorcándose en su casa de la calle 102 entre 31 y 33. El hallazgo ocurrió poco después del mediodía por parte de un familiar que fue a visitarlo y quien no se explicaba los motivos que llevaron al septuagenario al suicidio. Milenio.
Tres suicidios más ocurrieron en Yucatán en la últimas horas: uno se trató de un turista regiomontano que se quitó la vida en la madrugada del lunes en una cabaña de un hotel en Dzilam de Bravo;otro en la comisaría meridana de Molas, donde un hombre se ahorcó en su domicilio, y el tercero, en Progreso, donde un septuagenario también se colgó.
Sobre los hechos ocurridos en Dzilam de Bravo, se informó que una pareja de turistas de Nuevo León llegó a ese puerto del noreste del Estado y se hospedó en un hotel en la playa conocida como “Perla Escondida”.
Alrededor de la una de madrugada, la pareja comenzó a discutir en la cabaña que ocupaban y en un momento dado la fémina salió y se dirigió a la playa, dejando solo a su marido, Gerardo Treviño R., de 35 años de edad.
Unas dos horas después, la mujer regresó a la cabaña, pensando que su esposo ya se había dormido, pero lo halló ahorcado en uno de los troncos de la fachada del cuarto, por lo que a gritos solicitó auxilio al personal del hotel.
Con la ayuda de otros huéspedes y empleados del hotel descolgaron el cuerpo, sin embargo, cuando llegaron paramédicos de la Secretaría de Seguridad Pública sólo pudieron confirmar que el individuo había muerto.
Posteriormente se presentó personal del Ministerio Público y Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado para realizar las diligencias legales.
Otros dos casos
El segundo caso ocurrió en la comisaría meridana de Molas, donde Filiberto Simá Canché, de 53 años de edad, se quitó la vida por medio del ahorcamiento en su habitación y sus familiares se dieron cuenta de los hechos casi un día después.
Alrededor de las 11 de la noche del sábado, Filberto, quien se encontraba en estado de ebriedad, llegó a su casa, en la calle 16 entre 19 y 21 de Molas, y se fue directamente a su habitación.
Fue hasta cerca de las 8 de la noche del domingo, cuando sus familiares fueron a buscarlo debido a que en todo el día no había salido de su cuarto, lo encontraron ahorcado en un hamaquero.
Autoridades judiciales llegaron a tomar conocimiento de los hechos y realizar las diligencias legales.
Mientras, en Progreso, Raúl González, de 70 años de edad, decidió privarse de la existencia ahorcándose en su casa de la calle 102 entre 31 y 33. El hallazgo ocurrió poco después del mediodía por parte de un familiar que fue a visitarlo y quien no se explicaba los motivos que llevaron al septuagenario al suicidio. Milenio.