Ciudad de México, 13 de diciembre de 2018.- El Gobernador Mauricio Vila Dosal acudió este día a la Cámara de Diputados para exponer las principales necesidades presupuestarias de Yucatán y gestionar los recursos que permitan realizar, el próximo año, programas, obras y acciones que contribuyan a transformar las condiciones de vida de las familias de la entidad.
Después de participar en la Conferencia Global sobre el Cambio Climático (COP24) en Polonia, en la que fue el único mandatario estatal mexicano en intervenir y logró un financiamiento por 400,000 dólares del Gobierno de Noruega para la agenda ambiental del territorio, llegó a la capital mexicana para reunirse con legisladores federales de diversas fuerzas políticas, representadas en la Cámara baja, con miras a definir el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2019.
Como parte de su agenda de trabajo en el Palacio Legislativo de San Lázaro, sostuvo encuentros con los coordinadores parlamentarios de los Partidos Revolucionario Institucional (PRI), René Juárez Cisneros, y Verde Ecologista de México (PVEM), Arturo Escobar y Vega, a quienes planteó los principales planes y necesidades del estado.
De igual manera, se reunió con integrantes de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, que preside el diputado Alfonso Ramírez Cuéllar del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), donde expuso los requerimientos del territorio para los principales proyectos de inversión, programas, obras y acciones para el próximo año, en temas como salud, seguridad, campo, economía, infraestructura, desarrollo social, generación de empleo y educación, entre otros.
Cabe mencionar que el presupuesto de Yucatán para el siguiente ejercicio fiscal está orientado a combatir las carencias sociales e impulsar el crecimiento de la entidad, apoyado en medidas para hacer rendir más los recursos públicos y que el Gobierno le cueste menos a la ciudadanía.
Desde el 1 de octubre pasado, cuando asumió la titularidad del Poder Ejecutivo, Vila Dosal puso en marcha un Plan de Austeridad, que mediante la aplicación de diversas estrategias, genera un ahorro anual de mil millones de pesos en el gasto corriente, el cual se destinará a sectores prioritarios, como salud, educación, seguridad, desarrollo humano e inversión productiva.
Las medidas de dicho esquema contemplan el adelgazamiento de la burocracia y la devolución de camionetas y vehículos, cuyo valor comercial es superior a los 900,000 pesos para cada uno, así como la cancelación de la renta de otras 500 unidades.
Asimismo, se eliminó asesorías, consultorías y estudios de investigación no indispensables, y se ahorra 30 millones de pesos en combustible, equivalentes a 1.5 millones de litros, al reducir la flota estatal y hacer más eficiente su uso.
De igual manera, se dio de baja 400 vehículos que, por su antigüedad y condiciones, representan costos de operación mayores que los beneficios que generan, y se canceló 300 líneas de telefonía celular, entre otras acciones.