El dolor en el cuerpo, en la cabeza y en las articulaciones, fue la alerta que Jesica Salgado detectó como algo totalmente anormal, además, los malestares se acompañaban de temperatura alta y se prolongaron durante días. Los síntomas los había experimentado hace ocho años cuando contrajo dengue hemorrágico, en esta ocasión la enfermedad no fue de este tipo, pero sí se confirmó el dengue. Su caso se suma a los más de 400 que se han presentado en Acapulco tras el paso del huracán Otis.
El dengue es una infección viral que se transmite por la picadura de mosquitos del género Aedes Aegypti, presente en los climas tropicales y subtropicales. Esta enfermedad se ha incrementado de manera considerable en Acapulco, pues hasta el 13 de diciembre la Secretaría de Salud Guerrero informa que en la entidad se registran 830 casos positivos de dengue, concentrándose la mayoría en Acapulco.
"Derivados por el desastre natural que azotó esa región, a la fecha están confirmados 438 casos de dengue en el puerto”, afirma la entidad de salud.
La infección viral, que se transmite por la picadura de mosquitos, causa síntomas como:
Fiebre elevada
Dolor de cabeza, muscular y articular
Aumento de los ganglios linfáticos
Náuseas y vómito
Sarpullido
De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el dengue al convertirse en hemorrágico ocasiona sangrados tanto internos como externos y un shock hemorrágico, cuando la sangre no fluye a los órganos principales del cuerpo, lo que puede poner en peligro la vida.
Dengue tras huracán Otis: casos acumulados
El informe “Panorama Epidemiológico de Dengue 2023”, explica que a la semana 49, con corte al 11 de diciembre del 2023, a nivel nacional hay un total de 50,925 casos confirmados de dengue, el incremento a esta fecha es considerable debido a que a la misma semana en el 2022 se contabilizaban 12,122 casos de la enfermedad.
En el reporte de Guerrero se tiene que de los casos confirmados acumulados en la semana referida había un total de 2,671, un aumento en comparación con la misma semana del 2022, cuando había un total de 853. En los casos de dengue reportados en el estado de Guerrero a la semana 49 se reportan 126 casos de dengue grave y en el caso de dengue con signos de alarma se reportan 1,165 casos.
Padecer dengue tras el huracán
Jesica asegura que la primera ocasión que se enfermó de dengue tuvo una duración de dos semanas hasta que dejó de manifestar síntomas, sin embargo, en esta ocasión ya lleva casi el mismo tiempo enferma y apenas empieza a notar mejoría.
“Las primeras dos noches no podía dormir, me la pasé en la regadera con una fiebre horrible, me dolía todo el cuerpo y me la pasaba llorando por el dolor, y fue cuando dije 'esto no es una infección normal'. No me hice un estudio, pero tengo todos los síntomas y aquí donde vivo, que es en Pie de la Cuesta muchos vecinos tienen los mismo síntomas”, explica en entrevista con Sumédico.
El tratamiento que le indicaron a Jesica fue metamizol sódico, antibiótico para la garganta, desinflamantes, reposo y comer bien.
Jesica es bióloga y ve con tristeza que la vegetación fue arrasada por el paso del huracán Otis, aunque los síntomas del dengue van cediendo recuerda que la primera vez que tuvo esta enfermedad la fiebre era tan alta que le provocó alucinaciones y al ser de tipo hemorrágico tenía problemas de coagulación y con tan solo agarrarla de la muñeca ya tenia un moreton en la piel o manchas y le salía sangre por la nariz y la encía.
Jesica, sobreviviente de huracán Otis y paciente con dengue
En su segunda experiencia padeciendo dengue, la enfermedad no fue tan grave, pero en esta ocasión los síntomas físicos van a la par de las pérdidas materiales.
Los malestares que reproducen al mosco del dengue
“Hay mucha agua estancada por todos lados, hay criaderos de moscos, hay muchos mosquitos y moscas, eso es un foco de enfermedades como el dengue, acá la gente esta muy molesta pues el gobierno no hizo lo suficiente, como que están dormidos en su laureles”, menciona Jesica Salgado.
Al preguntarle si tras el paso de Otis las autoridades sanitarias de Acapulco han actuado a la altura de las necesidades de la población, la joven de 30 años responde: “están dormidos en sus laureles, la gente está muy molesta porque no han hecho lo suficiente”.
“Los vecinos hemos optado por quemar basura para que no se generen mosquitos, el gobierno aún no se da abasto para recoger los desechos, también en las colonias nos organizamos para limpiar la calle”, explica.
Jesica señala que en las primeras dos semanas Acapulco fue tierra de nadie y ahora a casi dos meses de que el huracán Otis impactó en el puerto su valoración es que “si no fuera por la gente local todo estaría muy sucio, el gobierno estatal y municipal no ha hecho nada”.
