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Es urgente que Mérida tenga un estudio de movilidad y que se aporten mecanismos para tratar de resolver las condiciones de operatividad de traslados para la población ya que el anillo periférico muy pronto podría estar rebasado, sostuvo el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Construcción, Luis Castillo Campos.
Al asistir a la puesta en marcha de las obras de modernización del distribuidor vial de la salida a Progreso, el empresario destacó que es prioritario que las autoridades consideren el desarrollo de un programa más ágil de operatividad para el anillo periférico.
“En muy poco tiempo el periférico de Mérida tendrá mucha más carga vehicular, en este momento tiene un aforo de 110 mil vehículos diarios, esto es, uno de cada cuatro automóviles de la ciudad, utilizan el periférico para ir de un sitio a otro”, precisó.
Además, dijo que la cervecería yucateca elevará un 25% su producción para el próximo año y eso obligará a generar más tráfico en la vía Mérida a Progreso a través del periférico.
Además, Progreso de ha convertido en cierta forma en una ciudad dormitorio y muy pronto, con las empresas que se podrán establecer en la Zona Económica de Progreso, donde se espera se generen unos 30 mil empleos, el uso de esta arteria vial será mucho mayor.
Es preciso que se considere cuanto antes una vía alterna únicamente para transporte pesado paralela a esta vía, pero no hay el recurso para una obra de este tipo.
“Se ha propuesto un segundo anillo vial para la ciudad, pero esa es otra inversión que no se ha establecido en monto y tiempo para su construcción”, agregó.
Castillo Campos explicó que el gobierno completó un proyecto para un arco vial en la zona norte, que serviría para conectar Puerto Progreso con la zona industrial de Hunucmá, que se ampliaría con una red ferroviaria, pero no se ha planteado un tiempo para esta obra.
Con todo esto la zona norte de la ciudad, densamente poblada, debido a los servicios y empresas y el crecimiento urbano residencial de esta área establecen con urgencia que el gobierno considere un estudio de movilidad que analice la capacidad de servicios públicos de transporte más amplios, eficientes y modernos para trasladar a un mayor número de personas a sus centros de trabajo sin la utilización de automotores.
“Es prioritario una mayor conciencia vial, educación y sensibilización de la población ya que se ha elevado sustantivamente el número de accidentes y siniestros de personas en esta vía de alta velocidad. Con todo esto, una mayor racionalización de los vehículos, porque cada día hay más automotores y menos gente utiliza el transporte colectivo”, detalló.
Castillo Campos expuso que el arco norte del periférico es el de mayor flujo vehicular en la ciudad por lo que su modernización es buena, pero debido a las condiciones del crecimiento de la ciudad podrá ser rebasado a muy corto plazo.
“Este distribuidor se inauguró en 1994, -hace 24 años- en ese entonces, circulaban en esta zona de la ciudad unos 5 mil 400 vehículos diarios, hoy la carga vehicular certificada es de 110 mil vehículos diarios y el acceso de entrada -de Progreso a Mérida- recibe 60 mil automotores al día”, explicó. Reporteros Hoy
