“Creo que las mujeres tenemos que ponernos las pilas y buscar más espacios”, declaró Ivonne Ortega Pacheco, secretaria general del PRI, al referirse a las condiciones de género dentro de su partido y las actividades que ella realiza en busca de igualdad de oportunidades políticas.
Es uno de los conceptos de la entrevista con la periodista Katia D’Artigues, de la que se transmitieron poco más de cinco minutos en la madrugada de ayer, en el espacio “Katia 360″ de “Barra de opinión” de Televisión Azteca.
En el sitio de internet de la televisora se pueden hallar otras partes de la plática. Algunos temas fueron la transformación del PRI, el retorno del partido a la Presidencia después de doce años en la oposición y la situación de la mujer priista.
También se tocaron asuntos personales de la ex gobernadora, como su embarazo, el momento más doloroso de su vida, su cambio físico, las tierras que posee en Dzemul y las propiedades que están a nombre de su sobrino Cornelio Aguilar Ortega, ahora de seis años.
Ofrecemos una síntesis de las declaraciones de la dirigente priista, en respuesta a preguntas de Katia D’Artigues y otras que planteó el público y fueron leídas por la entrevistadora:
El embarazo.- Lo que prometo lo cumplo: estoy embarazada, ya dejé de ser gobernadora.
Es una felicidad indescriptible. Empiezas a ver la vida de otra manera. Es “megadeseadísimo (el bebé)”.
Es niño… Te voy a decir como decía mi abuelo: “Es niño, macho, varón, masculino”. Jajajaja.
Quisiera homenajear a mi abuelo, que fue con el que crecí, pero estoy dudando porque los dos nombres están largos: Álvaro Humberto…
El cambio físico.- Me ha costado sangre, sudor y lágrimas. La gente puede pensar que bajé de peso por cambiar de “look” o por algo estético, pero cuando empiezo a pensar en la gubernatura, al ver los esquemas de propuestas de trabajo me doy cuenta de que Yucatán tiene los más altos índices de obesidad en el país, y de obesidad infantil. Entonces digo: ¿cómo puedo pararme ante una tribuna y hablar de combatir la obesidad si yo soy una persona obesa? Esa fue mi principal motivación.
Empiezas a bajar de peso, ves que las tallas te “empiezan a venir” y piensas en un corte de pelo, en maquillarte más, pero no fue estrictamente para cambiar por la elección (de la gubernatura). Ya llevaba cuatro elecciones con el peso que tenía, con los 116.600 kilos que pesaba.
Por supuesto que no (le costó al gobierno ese cambio físico), pero te voy a decir algo. Inclusive me gusta que me pregunten, por el mito de que “te operaste que no sé qué…” No estoy en contra de la cirugía. Creo que si puedes hacer algo para sentirte bien o para verte mejor, para que te eleve el autoestima, es válido, pero un gobierno es de 24 horas por 365 días del año. ¡Imagínate! La cirugía más pequeña te puede llevar una recuperación de tres semanas, un mes, no sé… Imagina que digas: “Adiós, me voy tres semanas porque me voy a hacer una cirugía”.
Hasta ahorita, no (se ha hecho una intervención).
Su propiedad de 1,706 hectáreas.- Desde 1931 le pertenece a mi familia. Si bien es una extensión amplia, no es una zona que tenga un alto “valor adquisitivo”. No están frente a la playa, están cerca de la playa, pero después de la carretera, que ya no valen.
Su rancho porcícola.- Sí, sí (lo conserva). Si no, ¿de qué vivo? Vivo de la porcicultura. Afortunadamente, en Yucatán somos de los principales exportadores de carne de cerdo.
Las tierras de su sobrino.- Son igual de un pueblo, que se llama Dzidzantún. Es de un rancho heredado de la familia de mi cuñado. Adquieren unas propiedades al lado. Cuando sale la nota le llamo a mi hermana y le digo: “¿Por qué no lo heredaste en lugar de cederle los derechos?” Y me responde que el notario les dijo que al heredarlo tenían que pagar no sé cuánto de impuestos…
A continuación, las respuestas que ofreció Ivonne Ortega a las preguntas sobre el PRI:
¿Qué vas a hacer desde la secretaría general del PRI para hacerlo (mejores condiciones políticas para la mujer)?
No se vayan a molestar los hombres, jajaja. Mira, lo que yo he buscado, y lo he conversado con las mujeres y los hombres de mi partido, es que lo que debemos tener las mujeres es igualdad de oportunidades, igualdad de condiciones en la competencia.
¿Y no es así?
Lamentablemente no. Tenemos condiciones más difíciles. Por ejemplo, cuando le toca a una mujer ser presidenta municipal, que por cierto, si bien no hay muchas gobernadoras sí hay muchas presidentas municipales de las principales capitales.Como secretaria del partido, lo que a mí me corresponde es generar la condición para que no sea la cuota sino que sea la condición que permita a la mujer llegar.
¿Qué aprendieron de perder la presidencia de la República en el 2000?
Mira, yo te voy a poner en lo personal. Yo tenía apenas un año y ocho meses de presidenta municipal cuando se pierde la presidencia de la República. Entonces en ese momento sentí que mi vida política se podía terminar, cuando todo era el presidente de la República o parecía que el partido no podía sobrevivir si no tenía la presidencia de la República.
Entonces, yo creo que lo primero que aprendimos es que el partido es fuerte…En la era pasada del priismo, por así decir, el presidente era el jefe del PRI.
¿Lo es ahora?
Mira, yo creo que el presidente Peña ha mostrado permanentemente su cercanía con el partido. Ha demostrado que tiene un gran compromiso con los priistas, pero tiene mayor compromiso con los ciudadanos, mexicanos en general, y si bien va a ser un presidente cercano al PRI, creo que será respetuoso con el partido.O sea, no les va a tirar línea…Pues, no la ha tirado… jajaja, no la ha tirado
¿Qué diferencia hay del PRI de 1998, cuando ocupaste tu primer cargo de eleccion popular, con el de ahora?
Hoy creo que es un PRI mucho más sensible, mucho más entendido. No quiero hablar mal de lo que se hizo en el pasado porque también se hicieron muchas cosas buenas, pero era un PRI, si tú me lo permites, todopoderoso por decir, así que tomaba decisiones que lastimaban a su propia militancia.
¿De qué manera vas a compaginar tu carrera política con la maternidad?
Me encanta que todo mundo haga esa pregunta, porque te voy a comentar: el 72 por ciento de las mujeres que trabajan tienen hijos. Entonces, todas las mujeres nos acomodamos “a las condiciones de acomodar el trabajo y la atención sin descuidar la atencion de los hijos”.
Hace algún momento alguien me decía que siempre para ayudar a una gran mujer hay otra gran mujer. Así que seguramente mi familia y yo estaremos al pendiente del bebé, dándole todo el cariño que se necesita pero cumpliendo con la encomienda que me dieron los militantes del PRI.