Un mes después de que las autoridades de Educación empezaron una batalla contra la comida chatarra en las escuelas primarias, esta medida no se ha podido cumplir cabalmente “por la demanda que tienen los productos entre los niños”.
—Sería bueno que además de la medida de erradicar la comida chatarra, la Secretaría de Educación cree comedores escolares donde los niños coman sanamente —manifestó Marlene Sandoval Manrique, presidenta de la Sociedad de Padres de Familia de la primaria Hermila Galindo.
A raíz de la epidemia de influenza humana A H1N1 de hace algunos meses, a padres de familia de esa escuela —en el fraccionamiento Juan Pablo II— les prohibieron seguir vendiendo alimentos a los alumnos.
Marlene Sandoval recordó que les pidieron dejar de vender para evitar contagios de influenza.
A raíz de la epidemia de influenza humana A H1N1 de hace algunos meses, a padres de familia de la escuela primaria “Herlinda Galindo” —en el fraccionamiento Juan Pablo II— les prohibieron seguir vendiéndoles alimentos a los alumnos.
La presidenta de la Sociedad de Padres de Familia de ese colegio, Marlene Sandoval Manrique, recordó que les pidieron dejar de vender para evitar contagios de influenza.
—El director prohibió que siguiera funcionando la cooperativa escolar, la cual vendía comida casera.
—La cooperativa funcionó de octubre a enero, cuando nos dijo (el director) que era mejor que no sigamos vendiendo —explicó, a su vez, Sonia Pacheco Romero. Las madres de familia dijeron que la medida aplicada por el director resultó contradictoria, ya que ellas ofrecían comida casera, pero ahora en el colegio sólo se les venden a los niños frituras, galletas, jugos y golosinas. —Nosotras vendíamos porciones de ensalada, sopa fría, pedazos de sandwichón, tortas, codzitos y otras cosas a tres pesos, eso era lo máximo que cobrábamos, pero a raíz de la influenza nos quitaron la concesión —apuntó Sonia Pacheco. Por su lado, Blanca Marcial Rivero, quien tiene una hija que cursa el cuarto grado en la “Herlinda Galindo”, dijo que ella ayudaba a las mamás a vender.
Las madres de familia dijeron que una buena medida de la Secretaría de Educación sería establecer comedores en las escuelas primarias, donde los niños consuman alimentos sanos y nutritivos para combatir el sobrepeso infantil.