Noticias de Yucatán
Poco a poco la idea de la ENEP como un feudo femenino está cambiando. Así como las jóvenes ganan terreno en carreras antes consideradas para varones —Ingeniería Civil, Ingeniería Mecánica— los hombres comienzan a incursionar en estudios “para mujeres”.
Actualmente, 13 muchachos estudian en la ENEP: 12 en Educación Intercultural Bilingüe y uno en Educación Inicial.
Sólo mujeres estudian para educadoras, pero no por un asunto de capacidades, ni de discriminación por sexo. “Es una cuestión cultural. Una educadora, se decía, es una jardinera, de ahí lo de jardín de niños. A lo que nos enfrentamos es a un estereotipo”, dice la directora, Amira Cámara Cortés.
Tal vez, continúa, tenga también que ver con que el mito de la masculinidad, que demoniza los trabajos “no bien vistos” para un hombre, como cuidar niños.
Esto tiende a cambiar. Por ahora no hay varones en Educación Preescolar, pero varios han intentado el ingreso, lo que pasa es que ha sido tan abrumadora la superioridad en número de las mujeres que presentan el examen, que ningún muchacho ha conseguido el pase.
Contra lo que se piensa, nunca se le ha negado el ingreso a los varones. “Las nuevas generaciones traen otros roles, otra mentalidad en materia de igualdad de géneros, por lo que algún día veremos una proporción igual de hombres y mujeres en la escuela”, finaliza. Megamedia.
Poco a poco la idea de la ENEP como un feudo femenino está cambiando. Así como las jóvenes ganan terreno en carreras antes consideradas para varones —Ingeniería Civil, Ingeniería Mecánica— los hombres comienzan a incursionar en estudios “para mujeres”.
Actualmente, 13 muchachos estudian en la ENEP: 12 en Educación Intercultural Bilingüe y uno en Educación Inicial.
Sólo mujeres estudian para educadoras, pero no por un asunto de capacidades, ni de discriminación por sexo. “Es una cuestión cultural. Una educadora, se decía, es una jardinera, de ahí lo de jardín de niños. A lo que nos enfrentamos es a un estereotipo”, dice la directora, Amira Cámara Cortés.
Tal vez, continúa, tenga también que ver con que el mito de la masculinidad, que demoniza los trabajos “no bien vistos” para un hombre, como cuidar niños.
Esto tiende a cambiar. Por ahora no hay varones en Educación Preescolar, pero varios han intentado el ingreso, lo que pasa es que ha sido tan abrumadora la superioridad en número de las mujeres que presentan el examen, que ningún muchacho ha conseguido el pase.
Contra lo que se piensa, nunca se le ha negado el ingreso a los varones. “Las nuevas generaciones traen otros roles, otra mentalidad en materia de igualdad de géneros, por lo que algún día veremos una proporción igual de hombres y mujeres en la escuela”, finaliza. Megamedia.