Noticias de Yucatán
*Tradición que une a locales y extranjeros
Con miles de meridanos y visitantes nacionales y extranjeros que se dieron cita para honrar una de las tradiciones más arraigadas entre los yucatecos, hoy se llevó al cabo la edición 2015 del “Paseo de las Ánimas”, que encabezó el alcalde Mauricio Vila Dosal, acompañado de su esposa María Eugenia Ortiz Abraham, presidenta del DIF.
El alcalde, en mensaje que dirigió a los meridanos en la tarima instalada a las puertas de la Ermita de Santa Isabel, ratificó que uno de los compromisos de su administración es promover las tradiciones, la convivencia, los valores y la identidad que nos caracterizan como meridanos
—Este evento es uno de los más grandes ejemplos, pues en el Paseo de las Ánimas tenemos una afluencia calculada en 40,000 personas y más de 300 altares —señaló—. Muchísima gente viene aquí con sus familias no solamente a pasar un momento agradable, sino también a conocer un poco más de nuestras tradiciones.
Subrayó que con el Paseo de las Ánimas Mérida sigue siendo un referente en todo el país, pero sobre todo permite conservar nuestras tradiciones y nuestra forma de vivir.
—Creo que lo más importante que tenemos en Mérida es la tranquilidad y la seguridad que existen en gran medida a que todos nos sentimos orgullosos de ser meridanos —expresó—. Sigámonos sintiendo orgullosos no sólo por los meridanos del pasado, sino también por los del presente y por la ciudad que queremos tener mañana, la que le queremos dejar a nuestros hijos.
También recordó que Mérida es la primera ciudad del país en reconocer el derecho de sus habitantes a la cultura, como quedó demostrado en días pasados con la firma la Carta de los Derechos Culturales.
—Hoy aquí, con nuestras tradiciones reforzamos nuestra cultura, porque nuestras tradiciones no son cosa del pasado —añadió—. Con este Paseo de las Ánimas que se realiza desde hace ocho años seguimos haciendo tradición.
Mauricio Vila y su esposa llegaron a las 7 de la noche a la calle 64, con 73, que fue inicio del derrotero. Se dirigieron caminando a La Ermita de Santa Isabel y en el trayecto saludaron a los vecinos.
Los más de 300 altares instalados a lo largo de todo el derrotero estuvieron a cargo de vecinos, Consejos de Participación Ciudadana, asociaciones civiles, escuelas y dependencias.
El Paseo de las Ánimas se ha consolidado como un referente en tradiciones y cultura, convirtiéndose en cita imperdible para meridanos, así como para turistas nacionales e internacionales. En el derrotero se observó a varios extranjeros que aprovecharon el servicio de “pintacaritas” para caracterizarse de calaveras y sumarse a los meridanos en esta fiesta anual del Paseo de las Ánimas.
El evento se convierte cada año en un reflejo de las costumbres y tradiciones más arraigadas para celebrar estas fechas dedicadas a los Fieles Difuntos y los altares son muestra de esto. Flores, mucbilpollos, dulces y bebidas se ofrendan en memoria de los que se adelantaron en el viaje eterno, a quienes se recuerda colocando en el altar un retrato, junto la infaltable cruz y las veladoras para alumbrar el camino del ánima.
Arte, cultura, tradición y herencia maya se conjugan en este significativo paseo. Recuerdos, rezos y cánticos propios de la ocasión se escucharon a cada paso, mientras el alcalde y su esposa, ambos luciendo el traje regional, recorrían las calles saludando a los participantes, a las rezadoras, a los niños, deteniéndose para las “fotos del recuerdo” que los meridanos le solicitaban. Esta tarde y noche, todos dieron vida a una tradición que se niega a morir y que el Ayuntamiento impulsa con esta exhibición de altares y cultura en general.
Luego del mensaje a las puertas de la Ermita, Mauricio Vila y su esposa, acompañados de funcionarios municipales, se dirigieron al Cementerio General, donde encabezaron la salida de la procesión de las Ánimas, que va del camposanto hasta la Ermita. Participaron decenas de niños, jóvenes y adultos que se caracterizaron para la ocasión y marcharon con veladoras en mano, rezando y cantando.
Un amplio programa cultural se presentó de manera simultánea en cuatro escenarios ubicados en la zona de La Ermita de Santa Isabel, la esquina de El Diamante, la entrada al Cementerio General y en el interior de éste. Los eventos incluyeron música prehispánica, la vistosa Vaquería de las Ánimas, actuaciones de los tríos La Siembra, Trova Nova y Ensueño; Leyendas Mayas a cargo de Jorge Moreno, teatro con la obra “Finados Desafinados”, así como el espectáculo prehispánico del “Pok ta Pok”, a cargo de la Dirección de Turismo y Fomento Económico, que incluyó diversas danzas mayas como la del Venado y la de los Cuatro Puntos Cardinales, interpretadas con música en vivo utilizando instrumentos como caracoles, flauta, ocarinas, maracas y el tunkul.
Largas filas se formaron para solicitar el servicio de “pintacaritas”, que la dirección de Turismo y Fomento Económico ofreció mediante instructoras de Cultora de Belleza del departamento de Centros de Capacitación Laboral. En esta ocasión exclusivamente ofrecieron caracterizaciones de ánimas, a tono con la celebración y mediante el pago de una cuota simbólica.
*Tradición que une a locales y extranjeros
Con miles de meridanos y visitantes nacionales y extranjeros que se dieron cita para honrar una de las tradiciones más arraigadas entre los yucatecos, hoy se llevó al cabo la edición 2015 del “Paseo de las Ánimas”, que encabezó el alcalde Mauricio Vila Dosal, acompañado de su esposa María Eugenia Ortiz Abraham, presidenta del DIF.
El alcalde, en mensaje que dirigió a los meridanos en la tarima instalada a las puertas de la Ermita de Santa Isabel, ratificó que uno de los compromisos de su administración es promover las tradiciones, la convivencia, los valores y la identidad que nos caracterizan como meridanos
—Este evento es uno de los más grandes ejemplos, pues en el Paseo de las Ánimas tenemos una afluencia calculada en 40,000 personas y más de 300 altares —señaló—. Muchísima gente viene aquí con sus familias no solamente a pasar un momento agradable, sino también a conocer un poco más de nuestras tradiciones.
Subrayó que con el Paseo de las Ánimas Mérida sigue siendo un referente en todo el país, pero sobre todo permite conservar nuestras tradiciones y nuestra forma de vivir.
—Creo que lo más importante que tenemos en Mérida es la tranquilidad y la seguridad que existen en gran medida a que todos nos sentimos orgullosos de ser meridanos —expresó—. Sigámonos sintiendo orgullosos no sólo por los meridanos del pasado, sino también por los del presente y por la ciudad que queremos tener mañana, la que le queremos dejar a nuestros hijos.
También recordó que Mérida es la primera ciudad del país en reconocer el derecho de sus habitantes a la cultura, como quedó demostrado en días pasados con la firma la Carta de los Derechos Culturales.
—Hoy aquí, con nuestras tradiciones reforzamos nuestra cultura, porque nuestras tradiciones no son cosa del pasado —añadió—. Con este Paseo de las Ánimas que se realiza desde hace ocho años seguimos haciendo tradición.
Mauricio Vila y su esposa llegaron a las 7 de la noche a la calle 64, con 73, que fue inicio del derrotero. Se dirigieron caminando a La Ermita de Santa Isabel y en el trayecto saludaron a los vecinos.
Los más de 300 altares instalados a lo largo de todo el derrotero estuvieron a cargo de vecinos, Consejos de Participación Ciudadana, asociaciones civiles, escuelas y dependencias.
El Paseo de las Ánimas se ha consolidado como un referente en tradiciones y cultura, convirtiéndose en cita imperdible para meridanos, así como para turistas nacionales e internacionales. En el derrotero se observó a varios extranjeros que aprovecharon el servicio de “pintacaritas” para caracterizarse de calaveras y sumarse a los meridanos en esta fiesta anual del Paseo de las Ánimas.
El evento se convierte cada año en un reflejo de las costumbres y tradiciones más arraigadas para celebrar estas fechas dedicadas a los Fieles Difuntos y los altares son muestra de esto. Flores, mucbilpollos, dulces y bebidas se ofrendan en memoria de los que se adelantaron en el viaje eterno, a quienes se recuerda colocando en el altar un retrato, junto la infaltable cruz y las veladoras para alumbrar el camino del ánima.
Arte, cultura, tradición y herencia maya se conjugan en este significativo paseo. Recuerdos, rezos y cánticos propios de la ocasión se escucharon a cada paso, mientras el alcalde y su esposa, ambos luciendo el traje regional, recorrían las calles saludando a los participantes, a las rezadoras, a los niños, deteniéndose para las “fotos del recuerdo” que los meridanos le solicitaban. Esta tarde y noche, todos dieron vida a una tradición que se niega a morir y que el Ayuntamiento impulsa con esta exhibición de altares y cultura en general.
Luego del mensaje a las puertas de la Ermita, Mauricio Vila y su esposa, acompañados de funcionarios municipales, se dirigieron al Cementerio General, donde encabezaron la salida de la procesión de las Ánimas, que va del camposanto hasta la Ermita. Participaron decenas de niños, jóvenes y adultos que se caracterizaron para la ocasión y marcharon con veladoras en mano, rezando y cantando.
Un amplio programa cultural se presentó de manera simultánea en cuatro escenarios ubicados en la zona de La Ermita de Santa Isabel, la esquina de El Diamante, la entrada al Cementerio General y en el interior de éste. Los eventos incluyeron música prehispánica, la vistosa Vaquería de las Ánimas, actuaciones de los tríos La Siembra, Trova Nova y Ensueño; Leyendas Mayas a cargo de Jorge Moreno, teatro con la obra “Finados Desafinados”, así como el espectáculo prehispánico del “Pok ta Pok”, a cargo de la Dirección de Turismo y Fomento Económico, que incluyó diversas danzas mayas como la del Venado y la de los Cuatro Puntos Cardinales, interpretadas con música en vivo utilizando instrumentos como caracoles, flauta, ocarinas, maracas y el tunkul.
Largas filas se formaron para solicitar el servicio de “pintacaritas”, que la dirección de Turismo y Fomento Económico ofreció mediante instructoras de Cultora de Belleza del departamento de Centros de Capacitación Laboral. En esta ocasión exclusivamente ofrecieron caracterizaciones de ánimas, a tono con la celebración y mediante el pago de una cuota simbólica.