Noticias de Yucatán
La Fiscalía identificó al presunto autor del homicidio de
una mujer cuyo cuerpo fue encontrado en montes de la población de Chan
Chocholá, comisaría de Maxcanú.
Se trata del taxista Fredy Can Ortega, quien ayer por la
tarde fue detenido luego de que un juez de Control emitió una orden de
aprehensión.
Lo curioso es que el homicidio se esclareció, pero la
víctima no ha sido identificada de manera oficial.
Lo único que se sabe de la fallecida es que ofrecía
servicios sexuales en cantinas de Maxcanú y Chocholá.
De acuerdo con las indagatorias asentadas en la Carpeta
de Investigación, el encuentro entre el presunto asesino y su víctima fue de
manera casual. El domingo por la noche, día de los hechos, el taxista subió a
la víctima en el centro de Maxcanú; la mujer se encontraba en estado de
ebriedad.
Luego de unos minutos de transitar sin rumbo fijo
acordaron sostener relaciones sexuales a cambio de $200.
La pareja se fue a un paraje, a la salida de la
población, donde tendrían el encuentro sexual.
En un momento dado comenzó una discusión, presuntamente
porque el taxista quiso sostener relaciones de una manera que la víctima no
quería y se negó.
La ahora occisa golpeó al taxista, lo que ocasionó que su
victimario tomara una piedra de gran tamaño y le pegara en la cabeza.
El golpe le fracturó el cráneo y le ocasionó a la mujer
traumatismo craneoencefálico, lo que finalmente la llevó a la muerte.
Tras los hechos, el chofer subió el cuerpo a su vehículo
y lo llevó a tirar en montes de la población de Chan Chocholá, donde fue
descubierto a las siete de la mañana del lunes, es decir, ocho horas después
del crimen.
El cuerpo estaba desnudo y no presentaba huellas de
violencia sexual, ya que la pareja nunca concretó el encuentro intimo que
habían acordado.
Ayer, luego de concretarse la detención, Can Ortega fue
presentado ante el juez de Control con sede en Umán, por lo que hoy se
realizará la audiencia de imputación.
El detenido sería acusado de feminicidio y se espera que
el juzgador le impute los delitos y otorgue la prisión preventiva oficiosa.
Es el primer feminicidio de 2018 y la pena máxima es de
hasta 50 años de prisión.