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VALLADOLID.- Los robos a casas habitación en el
fraccionamiento Cipreses retorna de nuevo y sus habitantes de plano ya no
buscan que hacer para enfrentar este problema y lo primero que hacen es
organizarse para enfrentar a los delincuentes anunciando lincharlos cuando
atrapen a alguno.
Es así como a 17 días de asumir la Presidencia Municipal,
Enrique Ayora Sosa tiene su primer retor: enfrentar y dar a solución a la
primera protesta de vecinos del fraccionamiento “Cipreses”, por la creciente
indignación por la ola de robos que han sufrido desde hace años y que amenaza
con retornar de nuevo por dos recientes robos registrados.
Los vecinos se quejan por falta de vigilancia policiaca y
por robos que aunque son denunciados quedan impunes. Incluso, colgaron mantas
en las que amenazan con linchar al ladrón que atrapen.
La situación económica del país, del Estado y de
Valladolid provocan que el robo doméstico se incremente debido a que la gente
en este momento es capaz de llevarse lo que sea que cueste 100 pesos. 200, 300
hasta una cantidad considerable de pesos, para luego vender y así paliar su
necesidades inmediatas de hambre.
Los robos a casas habitación en el fraccionamiento
Cipreses retorna de nuevo y sus habitantes de plano ya no buscan que hacer para
enfrentar este problema.
Afirman que en esta semana se han registrado dos nuevos
robos, pues los ladrones aprovechan para hacer sus fechorías cuando los dueños
salen a trabajar y las casas se quedan solas, pues muchos de ellos son maestros
o burócratas que trabajan por la mañana y sus predios están rodeados de
terrenos baldíos.
A los vecinos del lugar no les ha quedado más remedio que
organizarse y recientemente formaron un grupo de Whatsapp a través del cual se
comunican cualquier anomalía. La intención de los vecinos es protegerse ellos
mismos y tratar de enfrentar este problema que los aqueja pues la vigilancia
policial brilla por su ausencia.
En el lugar se puede observar cómo los vecinos han
empezado a reforzar sus casas mediante la colocación de rejas en puertas y
ventanas, además de que planean una alarma vecinal.
Los ladrones han cargado con todo en algunos predios:
dinero en efectivo, alhajas, pantallas de TV, aparatos de aires acondicionados,
hornos de microondas y otros enseres.
En el lugar hay una psicosis colectiva por los robos. Los
vecinos sospechan ya de todos y también se sospecha de que se trata de una
banda o de grupos organizados que se dedican a robar casas. Según las
versiones, hay personas que se encargan de averiguar en cuáles no están sus
propietarios para robarla .
El problema del robo a casa habitación es un problema
creciente en Yucatán y las mismas autoridades así lo han reconocido y
Valladolid no es la excepción, pues los robos persisten y en Cipreses es un
problema recurrente al que ninguna administración ha puesto fin.-(El Gran
Kanxoc, Semanario del Oriente Yucateco y el Dicho Popular).
