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Gases lacrimógenos y helicópteros en vuelos rasantes fueron parte del despliegue de fuerza mostrado por el gobierno de Estados Unidos durante un simulacro de crisis de seguridad nacional que realizó ayer en la garita de San Ysidro, en la frontera con México, en el que participó la Policía Federal (PF).
Mientras decenas de miembros de la caravana migrante estacionados en esta ciudad –limítrofe con San Diego, California– se congregaban en el paso peatonal de El Chaparral, a menos de un kilómetro de San Ysidro, autoridades del vecino país verificaron que todas las dependencias y personal que resguardan su frontera sur tuvieran desempeño óptimo ante un eventual cruce masivo de centroamericanos.
Durante los 40 minutos que duraron las maniobras, elementos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés), cerraron el puerto fronterizo de San Ysidro (el más transitado del mundo) provocando gran caos en Tijuana, ciudad desde la cual diariamente cruzan a California 130 mil personas.
A las 13:40 horas (tiempo local), la CBP cerró las puertas de entrada vehicular y peatonal, lo que ocasionó atascamiento de autos y ciudadanos. Las autoridades se desplegaron con escudos y armas largas en las 26 puertas de acceso al territorio estadunidense, al igual que los agentes de la PF: estos últimos desde el lado mexicano.
Durante el simulacro, funcionarios del gobierno de Donald Trump arrojaron en su territorio gas lacrimógeno y en cuatro ocasiones detonaron explosivos. Varios helicópteros realizaron sobrevuelos. Fue un ejercicio de cierre total de la frontera.
Estados Unidos celebró este 22 de noviembre el Día de Acción de Gracias, por lo que cientos de turistas, principalmente de Tijuana, cruzan a diversas zonas de California para celebrar con familiares y amigos. Otros van de compras para aprovechar el descuento en tiendas departamentales.
Cada año, para esta celebración, se forman largas filas en ambas garitas de esta frontera, pero ayer, ante el asombro de los ciudadanos, fue cerrado totalmente el ingreso, tanto peatonal como vehicular.
Unos 200 migrantes centroamericanos se apostaron en la garita El Chaparral, con la intención de conocer las posibilidades reales de ingresar a Estados Unidos, previa solicitud de asilo.
Los extranjeros salieron del albergue que autoridades locales acondicionaron en la unidad deportiva Benito Juárez para acudir a la línea internacional.
Un migrante que se entrevistó con autoridades de migración y de la PF, quien pidió el anonimato, manifestó que permanecerán en las inmediaciones de la garita hasta que su gente lo decida.
El gobierno de Baja California informó ayer que hasta ahora han arribado a Baja California unos 7 mil 479 migrantes de las diversas caravanas, de los cuales 5 mil 800 permanecen en Tijuana y mil 679 en Mexicali.
Con información de Notimex
