El pasado 1 de enero el cuerpo de la azafata Christine
Angelica Dacera -de 23 años- fue declarado sin vida después de aparentemente
sufrir una violación múltiple tras participar en una fiesta de Año Nuevo, lo
cual ha dejado varios sospechosos y preguntas en el caso.
De acuerdo a información de medios locales, como el Manila
Bulletin, la investigación policial reveló que entre el 31 de diciembre de 2020
y el 1 de enero de 2021 se realizó una fiesta con motivo de Año Nuevo en dos
habitaciones (2207 y 2209) del City Garden Grand Hotel de la ciudad de Makati,
Filipinas.
Según el jefe policial de la ciudad filipina, Harold
Depositar, en la fiesta que participó Christine Angelica solo había tres amigos
de ella y el resto eran cercanos de sus conocidos.
Cerca del medio día del 1 de enero, el cuerpo de Dacera fue
encontrado inconsciente por su amigo Rommel Galida, quien también trabaja como
asistente de vuelo. Al hallar así a Christine, Galida pidió la ayuda de otros
dos amigos: John de la Serna y Gregorio Ángelo Rafael de Guzmán, este último
reveló que buscó realizarle una reanimación cardiopulmonar (RCP) a Christine,
acción que también repitió el gerente de seguridad del hotel, ambos sin éxito.
Tras los RCP fallidos la azafata de Philippine Airlines fue
llevada a un hospital de Makati, donde fue declarada muerta. Posteriormente el
cuerpo fue llevado a un laboratorio criminal para realizarle un examen
médico-legal.
Para el día 4 de enero, la policía señaló que el
fallecimiento de Dacera pudo ser producto de una violación, esto después de que
fueran encontrados moretones en su cuerpo y rastros de semen en sus genitales,
lo cual indicó que tuvo contacto sexual. Debido a esto, la policía presentó un
caso provisional de violación con homicidio contra 11 personas que fueron parte
de la fiesta días antes.
Por su parte, Depositar mencionó que los informes también
mencionaban que un aneurisma pudo ser la causa de la muerte de la azafata,
aunque señaló que las contusiones encontradas y las laceraciones no eran
normales en una relación sexual.
Por su parte, la Policía Nacional de Filipinas aseguró que
se había dado la detención de tres sospechosos (y que el resto ya habían sido
identificados), mismos que en sus declaraciones presentaban historias
“contradictorias” e incluso algunos de ellos aseguraban ser homosexuales, pero
eso no es motivo suficiente para deslindar responsabilidades para Depositar,
quien afirmó que todos los que estuvieron fueron igualmente responsables.
“Simplemente dejaron que sucediera. Podrían haberlo
detenido. Este es un ejemplo clásico de que el acto de uno es un acto de
todos”, dijo el jefe policial.
Para el 6 de enero el fiscal jefe de Makati ordenó la
liberación de las tres personas arrestadas y pidió la realización de una
investigación preliminar sobre la denuncia contra los 11 sospechosos, pues
señaló que no había suficiente pruebas durante el proceso de investigación.
Fuente: Noticieros Televisa