Noticias de Yucatán
GUATEMALA (EFE).— La cifra de muertos por el deslave de un cerro que arrasó el pasado jueves una zona aledaña a la capital de Guatemala subió ayer a 59, mientras 350 personas siguen desaparecidas, informaron fuentes oficiales.
La portavoz del Ministerio Público, Julia Barrera, indicó a periodistas que la cifra de víctimas mortales asciende ya a 59 y de ellas sólo 20 han sido identificadas, mientras de las 24 restantes sólo “se recuperaron partes”.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) dijo a su vez que aún hay 350 personas desaparecidas.
Inicialmente las autoridades estimaban en 600 los desaparecidos, cifra que disminuyó ayer.
Este desbarajuste en las cifras se debe a la lentitud de los protocolos, dijo el secretario ejecutivo de la Conred, Alejandro Maldonado, quien agregó que los datos de la institución que representa, a pesar de ir “más lentos” son “muy confiables”. “Tristemente sabemos que no van a bajar”, añadió. explicó que el número de desaparecidos va disminuyendo en la medida en que la población reporta a la municipalidad su estado, por lo que hizo un llamado a los afectados para que se pongan en contacto con las autoridades.
Julio Sánchez, vocero del comando de rescate El Cambray II, de Santa Catarina Pinula, explicó que un total 1,293 personas trabajan en el área afectada, dividida en cinco sectores para facilitar las labores.
La Conred, por medidas de seguridad, ha prohibido el acceso a la zona de cualquier persona que no esté autorizada y reiteró que el país tiene la capacidad para hacer frente a este suceso.
Según el último balance, las personas rescatadas con vida desde que se registró la tragedia el jueves ascienden a 26, 16 de ellos no han sido identificados y otro es un menor de edad, además hay más de 170 albergados.
Sánchez reconoció que si llueve aumentarán las complicaciones porque el terreno se volverá lodoso, lo que dificultará las labores, además de que puedan ocurrir nuevos derrumbes debido a que la zona es de riesgo y la corona del deslave está inestable por la fractura del cerro.
Hoy finaliza el plazo de 72 horas de búsqueda establecido en el protocolo internacional, aunque prevén que continúen las labores.
La institución estatal, que declaró el viernes alerta naranja a nivel nacional y roja a nivel municipal, continúa intentando desalojar de sus viviendas a la población aledaña que pudiera estar en peligro.
De hecho, dos bomberos que trabajan en el lugar quedaron atrapados el sábado cuando les cayó encima un paredón de tierra y uno de ellos ya fue rescatado.
Por su parte, familias ya empiezan a dar su último adiós a sus seres queridos y esta mañana en el cementerio municipal de Santa Catarina Pinula se enterraban los cuerpos de un adulto y de un niño.
GUATEMALA (EFE).— La cifra de muertos por el deslave de un cerro que arrasó el pasado jueves una zona aledaña a la capital de Guatemala subió ayer a 59, mientras 350 personas siguen desaparecidas, informaron fuentes oficiales.
La portavoz del Ministerio Público, Julia Barrera, indicó a periodistas que la cifra de víctimas mortales asciende ya a 59 y de ellas sólo 20 han sido identificadas, mientras de las 24 restantes sólo “se recuperaron partes”.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) dijo a su vez que aún hay 350 personas desaparecidas.
Inicialmente las autoridades estimaban en 600 los desaparecidos, cifra que disminuyó ayer.
Este desbarajuste en las cifras se debe a la lentitud de los protocolos, dijo el secretario ejecutivo de la Conred, Alejandro Maldonado, quien agregó que los datos de la institución que representa, a pesar de ir “más lentos” son “muy confiables”. “Tristemente sabemos que no van a bajar”, añadió. explicó que el número de desaparecidos va disminuyendo en la medida en que la población reporta a la municipalidad su estado, por lo que hizo un llamado a los afectados para que se pongan en contacto con las autoridades.
Julio Sánchez, vocero del comando de rescate El Cambray II, de Santa Catarina Pinula, explicó que un total 1,293 personas trabajan en el área afectada, dividida en cinco sectores para facilitar las labores.
La Conred, por medidas de seguridad, ha prohibido el acceso a la zona de cualquier persona que no esté autorizada y reiteró que el país tiene la capacidad para hacer frente a este suceso.
Según el último balance, las personas rescatadas con vida desde que se registró la tragedia el jueves ascienden a 26, 16 de ellos no han sido identificados y otro es un menor de edad, además hay más de 170 albergados.
Sánchez reconoció que si llueve aumentarán las complicaciones porque el terreno se volverá lodoso, lo que dificultará las labores, además de que puedan ocurrir nuevos derrumbes debido a que la zona es de riesgo y la corona del deslave está inestable por la fractura del cerro.
Hoy finaliza el plazo de 72 horas de búsqueda establecido en el protocolo internacional, aunque prevén que continúen las labores.
La institución estatal, que declaró el viernes alerta naranja a nivel nacional y roja a nivel municipal, continúa intentando desalojar de sus viviendas a la población aledaña que pudiera estar en peligro.
De hecho, dos bomberos que trabajan en el lugar quedaron atrapados el sábado cuando les cayó encima un paredón de tierra y uno de ellos ya fue rescatado.
Por su parte, familias ya empiezan a dar su último adiós a sus seres queridos y esta mañana en el cementerio municipal de Santa Catarina Pinula se enterraban los cuerpos de un adulto y de un niño.
