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Kellogg Company descartó que el cierre de su planta en Venezuela afecte la operación de México u otro país. Además, la firma se reserva acciones legales por el uso de la marca que a partir de hoy sean producidas y distribuidas en el país gobernado por Nicolás Maduro.
Kellogg Company no prevé afectaciones para México u otros países en Latinoamérica por el cierre de su planta en Venezuela. Sin embargo, la empresa estadounidense de alimentos sí se reservará acciones legales por el uso indebido de sus marcas en el país sudamericano.
“Esta situación no impactará de forma alguna la operación de Kellogg en países distintos a Venezuela”, asegura la empresa productora del cereal Corn Flakes a Alto Nivel.
Kellogg confirma que este 15 de mayo dejó de operar en Venezuela y confirma que sus instalaciones han sido tomadas por el gobierno de Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, acción realizada sin el consentimiento o participación de la firma.
“Kellogg no es responsable del uso no autorizado de sus nombres comerciales y marcas por parte de terceros sin autorización expresa de Kellogg Company, quien ejercerá las acciones legales correspondientes a su alcance”, asegura en su respuesta a la solicitud de información de este medio.
Ayer, Nicolás Maduro ordenó la toma de las instalaciones de la planta y acusó que la decisión de la empresa obedecía a una acción política de las trasnacionales a 4 días de los comicios presidenciales en Venezuela
“¿Qué hizo el gobierno revolucionario? Llegó de inmediato el ministro del Trabajo, los ministros de la Economía abrieron la planta y se la hemos entregado a los trabajadores y está produciendo con la clase obrera industrial”, dijo el mandatario este martes.
Asimismo, la compañía informa que no se hace responsable de la seguridad y calidad de cualquier producto hecho o comercializado a partir de la ocupación gubernamental.
El mandatario venezolano acusó de que el fin de la relación laboral con los empleados de Kellogg era ilegal. “Hoy en Maracay la empresa Kellogg’s, en manos de unos inversionistas mexicanos, amaneció con las puertas cerradas y sólo les depositaron en las cuentas las prestaciones sociales a los trabajadores, lo cual es completamente inconstitucional e ilegal”, dijo Nicolás Maduro.
Kellogg responde que “todos los activos, compromisos y garantías legales han sido cubiertos por Kellogg a favor de sus empleados, clientes y proveedores de Venezuela. La distribución de los productos de Kellogg en Venezuela ha sido suspendida, así como el uso de sus Marcas y Personajes. A partir de ahora, ningún producto Kellogg podrá ser comercializado en el país sin autorización expresa de Kellogg Company”, dice la empresa.
Respecto a los responsables de la operación que mantuvo Kellogg, la empresa asegura que “en diciembre de 2016, Kellogg desconsolidó contablemente su negocio de Venezuela, por lo que desde entonces operaba como una empresa aparte”.
Kellogg cuenta con 10 plantas de producción en Latinoamérica. Algunas de sus instalaciones se encuentran en Medellín, Colombia, y Querétaro, en México, las cuales atienden la demanda de Centroamérica, como en su momento lo hizo la fábrica en Venezuela.
La empresa produce desde su planta en México 110 millones de kilos de cereal para 14 de las 15 marcas, y laboran 700 colaboradores. Esta instalación es valuada en 50 millones de dólares (mdd), de acuerdo con información de la empresa difundida en la prensa mexicana.
Kellogg en Venezuela tiene una participación de 47.9%, con ventas por 47.9 mdd, mientras que en México cuenta con una participación de 42.7 y ventas por 272.1 mdd, de acuerdo con datos de Euromonitor International.
Clorox, Kimberly Clark y General Motors son algunas de las empresas que abandonaron Venezuela en los últimos años por el deterioro de la situación económica en la nación bolivariana.
Kellogg prefiere decirle hasta pronto al país sudamericano y no un adiós definitivo. “Agradecemos a los cerca de 300 trabajadores de Kellogg en Venezuela por su compromiso y apoyo. Asimismo, Kellogg continúa comprometida con Latinoamérica y buscaremos retomar nuestras operaciones en Venezuela una vez que las condiciones del país así lo permitan”.
Kellogg Company descartó que el cierre de su planta en Venezuela afecte la operación de México u otro país. Además, la firma se reserva acciones legales por el uso de la marca que a partir de hoy sean producidas y distribuidas en el país gobernado por Nicolás Maduro.
Kellogg Company no prevé afectaciones para México u otros países en Latinoamérica por el cierre de su planta en Venezuela. Sin embargo, la empresa estadounidense de alimentos sí se reservará acciones legales por el uso indebido de sus marcas en el país sudamericano.
“Esta situación no impactará de forma alguna la operación de Kellogg en países distintos a Venezuela”, asegura la empresa productora del cereal Corn Flakes a Alto Nivel.
Kellogg confirma que este 15 de mayo dejó de operar en Venezuela y confirma que sus instalaciones han sido tomadas por el gobierno de Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, acción realizada sin el consentimiento o participación de la firma.
“Kellogg no es responsable del uso no autorizado de sus nombres comerciales y marcas por parte de terceros sin autorización expresa de Kellogg Company, quien ejercerá las acciones legales correspondientes a su alcance”, asegura en su respuesta a la solicitud de información de este medio.
Ayer, Nicolás Maduro ordenó la toma de las instalaciones de la planta y acusó que la decisión de la empresa obedecía a una acción política de las trasnacionales a 4 días de los comicios presidenciales en Venezuela
“¿Qué hizo el gobierno revolucionario? Llegó de inmediato el ministro del Trabajo, los ministros de la Economía abrieron la planta y se la hemos entregado a los trabajadores y está produciendo con la clase obrera industrial”, dijo el mandatario este martes.
Asimismo, la compañía informa que no se hace responsable de la seguridad y calidad de cualquier producto hecho o comercializado a partir de la ocupación gubernamental.
El mandatario venezolano acusó de que el fin de la relación laboral con los empleados de Kellogg era ilegal. “Hoy en Maracay la empresa Kellogg’s, en manos de unos inversionistas mexicanos, amaneció con las puertas cerradas y sólo les depositaron en las cuentas las prestaciones sociales a los trabajadores, lo cual es completamente inconstitucional e ilegal”, dijo Nicolás Maduro.
Kellogg responde que “todos los activos, compromisos y garantías legales han sido cubiertos por Kellogg a favor de sus empleados, clientes y proveedores de Venezuela. La distribución de los productos de Kellogg en Venezuela ha sido suspendida, así como el uso de sus Marcas y Personajes. A partir de ahora, ningún producto Kellogg podrá ser comercializado en el país sin autorización expresa de Kellogg Company”, dice la empresa.
Respecto a los responsables de la operación que mantuvo Kellogg, la empresa asegura que “en diciembre de 2016, Kellogg desconsolidó contablemente su negocio de Venezuela, por lo que desde entonces operaba como una empresa aparte”.
Kellogg cuenta con 10 plantas de producción en Latinoamérica. Algunas de sus instalaciones se encuentran en Medellín, Colombia, y Querétaro, en México, las cuales atienden la demanda de Centroamérica, como en su momento lo hizo la fábrica en Venezuela.
La empresa produce desde su planta en México 110 millones de kilos de cereal para 14 de las 15 marcas, y laboran 700 colaboradores. Esta instalación es valuada en 50 millones de dólares (mdd), de acuerdo con información de la empresa difundida en la prensa mexicana.
Kellogg en Venezuela tiene una participación de 47.9%, con ventas por 47.9 mdd, mientras que en México cuenta con una participación de 42.7 y ventas por 272.1 mdd, de acuerdo con datos de Euromonitor International.
Clorox, Kimberly Clark y General Motors son algunas de las empresas que abandonaron Venezuela en los últimos años por el deterioro de la situación económica en la nación bolivariana.
Kellogg prefiere decirle hasta pronto al país sudamericano y no un adiós definitivo. “Agradecemos a los cerca de 300 trabajadores de Kellogg en Venezuela por su compromiso y apoyo. Asimismo, Kellogg continúa comprometida con Latinoamérica y buscaremos retomar nuestras operaciones en Venezuela una vez que las condiciones del país así lo permitan”.
