Florida.- “Por alguna razón odiaba a la gente y quería que muriera todo el mundo”, relató la ex novia del joven que ayer asesinó a balazos a cinco personas en un banco en Florida, “le expulsaron de la escuela por tener un sueño en el quemataba a todo el mundo en su clase, y llevaba tanto tiempo amenazando con hacer esto, ha tenido sueños sobre esto”.
A todas las personas a las que se lo conté, ninguna se lo tomó en serio, es muy desafortunado que haya terminado así, añadió la joven en declaraciones a la emisora WSBT.
El tirador, Zephen Xaver, de 21 años, había crecido en Plymouth, un pueblo de 10.000 habitantes en Indiana, y se mudó el pasado otoño junto a su madre a Sebring, una localidad también pequeñita en Florida, a 90 millas al este de Tampa.
El joven fue contratado en pruebas el 2 de noviembre como guarda en la cercana prisión de Avon Park, pero dimitió el 9 de enero sin que se conozcan los motivos
Días antes decidió también dejar sus estudios universitarios a distancia, que había comenzado en septiembre en el Stevens-Henager College de Salt Lake City (Utah). Vivía en un hogar prefabricado sin ningún detalle fuera de lo normal, apenas a cuatro millas de distancia de la oficina del SunTrust Bank en la que ocurrió la tragedia.
A las 12:36 horas del miércoles, la policía recibió la llamada del propio Xaver, que, desde el interior del banco, les dijo: “He disparado a cinco personas”. Ni siquiera está claro que fuera un intento de robo, la policía no ha explicado cuáles pudieron ser sus motivos. En el banco no quedó nadie más con vida, sólo el asaltante, que se atrincheró allí y se negó a salir cuando la policía rodeó el edificio.
Las autoridades ataron cables a las puertas para intentar abrirlas por la fuerza, pero sólo pudieron reventar las manijas, según contó un testigo, Stefan Roehrig, a la emisora WFLA. Fue entonces cuando el equipo de fuerzas especiales SWAT decidió entrar en el edificio con un vehículo blindado, que embistió las puertas e irrumpió en el banco. Poco después, los agentes sacaban a Xaver ileso y esposado.
La joven explicó desde Indiana que Xaver le había contado la semana pasada que se había comprado un arma, pero “nadie le hizo mucho caso” porque siempre le habían gustado las armas, según informa el diario The Washington Post.
Hoy es un día trágico para nuestra comunidad, hemos sufrido una pérdida significativa a menos de un criminal sin sentido que cometió un crimen sin sentido, explicó el jefe de policía, Karl Hoglund.
AP
