MEXICO (AP) .- Una serie de mensajes de texto intercambiados durante más de un mes entre Joaquín “El Chapo” Guzmán y la actriz mexicana Kate del Castillo muestran que el narcotraficante tenía otros intereses además de hacer una película sobre su vida: coquetear con ella.
La transcripción de los mensajes publicada el miércoles por el diario “Milenio”, y confirmados como auténticos por un funcionario federal, dejan claro que el principal interés de Guzmán era conocer en persona a la actriz, famosa por haber protagonizado la serie de televisión “La Reina del Sur”, donde interpreta a una poderosa narcotraficante.Los mensajes fueron interceptados por el gobierno mexicano, de acuerdo con el diario, que no reveló cómo los obtuvo. El funcionario tampoco dio detalles.
La conversación entre ambos, que empieza antes de la reunión que tuvieron el 2 de octubre y sigue durante noviembre, también pone de manifiesto que “El Chapo” desconocía quién era el actor Sean Penn, con quien se reunió en un escondite de las montañas del noroccidente de México, una cita conseguida gracias a la confianza que el capo dice tener en la actriz y a la que también acudió Del Castillo.
–”¿Cómo se llama ese actor?” preguntó El Chapo en uno de los chats.
El funcionario federal, que pidió el anonimato por no estar autorizado a hablar sobre el tema, aseguró que la serie de mensajes entre el capo y la actriz eran auténticos. En la mayoría, Guzmán expresa admiración por Del Castillo y sus ganas de verla, más que interés en los pormenores de la película. Y la actriz le sigue el juego
–”Te cuento que yo estoy más emocionado en ti que en la historia, amiga”, le dice “El Chapo”.
“Jajaja, me encanta saberlo”, contesta ella, que aparece en el chat con el nombre de “ermoza” en lugar de “hermosa”, que es la forma correcta de escribir esa palabra.
–”Ya vénganse, que tengo demasiadas ganas de atenderte como debe ser, amiga. Eres lo mejor de este mundo”, dice el narcotraficante en otro momento a la vez que asegura: “te cuidaré más que a mis ojos”.
–”Me mueve demasiado que me digas que me cuidas, jamás nadie me ha cuidado, ¡gracias!”, responde la actriz.
Guzmán, casado con la ex reina de belleza Emma Coronel, pero que ha tenido hijos con diversas mujeres y tiene fama de conquistador, anuncia en otro momento de la conversación:
–”Mi mamá quiere conocerte. Le comenté de ti. No te desanimes, que no pasa nada. Todo lo tendré al 100″.
–”Te quiero”, añade.
El narcotraficante y la actriz planeaban verse en una segunda ocasión después del encuentro con Sean Penn y el capo hasta la felicita por su cumpleaños.
–”¡¡¡Qué buen regalo de cumpleaños!!! ¡Gracias! Ya nos abrazaremos muy pronto”, responde ella a la felicitación.
La AP intentó contactar a Del Castillo con sus representantes, en su casa en Los Ángeles y a través de correos electrónicos, pero no ha obtenido respuesta.
El miércoles por la tarde, la actriz publicó su primera reacción a los comentarios en su cuenta oficial de Twitter: “Gracias por su apoyo. Como era de esperarse muchos han decidido manipular la información y fabricar historias falsas para distraernos del verdadero tema. Pronto contaré mi versión. Kate del Castillo”.
En los mensajes, Guzmán se muestra consciente de que agentes de inteligencia estadounidenses o mexicanos pueden estar tras la pista de sus contactos y pide a su abogado que alerte a la actriz de que una mujer, “la comadre”, a la que iba a ver Del Castillo “tiene todos los aparatos intervenidos, y en la casa tiene cámaras de la DEA para ver quién la visita”.
Del Castillo le llega a alertar en otro momento, ya después de su cita, que “mi acompañante me dijo que me tienen bien pinchada y esperan que yo los lleve a ti. No te puedo arriesgar ahora, es demasiado peligroso, por más que los dos (Sean Penn y ella) queremos verte y cumplir con la misión que me encargaste”.
Las autoridades mexicanas han confirmado que el capo parecía enamorado de la actriz y que, tal vez por eso, cuando los infantes de Marina allanaron el rancho en el que se había estado escondiendo encontraron testosterona inyectable, un medicamento que incrementa la libido de los hombres aunque no se sabe si sería de Guzmán o de otra persona.
La explicación del enamoramiento es algo que parece creíble para analistas de seguridad como Alejandro Hope, quien recordó la debilidad del narcotraficante por las mujeres, y que “tiene 18 hijos, está casado con una mujer 30 años más joven que él”.
Más allá del coqueteo, Hope advierte que la filtración de este tipo de mensajes puede dar alas a la defensa de ‘El Chapo’ ya que se está violando la confidencialidad de una investigación en curso.
“Le están dando a “El Chapo” bases para apelar”, añadió.
En otro momento del cruce de mensajes, Del Castillo menciona a un abogado en Estados Unidos que presuntamente estaba dispuesto a representar a Guzmán en el tema de la película, pero el abogado dijo que nunca tuvo ningún contacto con “El Chapo” o con nadie que hablara de su parte.
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, al ser preguntado el miércoles en un acto público sobre los mensajes de texto, no quiso hacer ningún comentario al respecto y se remitió a la información que, según dijo, pronto ofrecerá la Fiscalía General.
Al margen de estos chats, México ya anunció que investiga si se cometió algún delito en la reunión que tuvieron los actores con Guzmán no a las personas en concreto.
Para Carlos Barragán y Salvatierra, director del Seminario de Derecho Penal de la Universidad Nacional Autónoma de México, no hay mucho espacio para acusar a Penn o Del Castillo, a menos de que hayan recibido dinero o regalos del capo.
“Si durante la comida ‘El Chapo’ les dio dinero, una joya, les hizo una transferencia para la película o hubo algún tipo de contraprestación material, entonces se podría acusar a los actores de lavado de dinero”, dijo el experto a The Associated Press.
Aclaró, sin embargo, que hablar, cruzar mensajes o cartas o “reunirse con un prófugo o un criminal no es un delito, porque si bien la ley dice que deberíamos denunciar a dicho criminal, no hay pena que pueda aplicarse si no se denuncia”.
Haya habido delito o no durante ese encuentro en la sierra mexicana, lo que parece quedar claro es que la megalomanía de Guzmán Loera, al querer inmortalizarse en una película, y su espíritu conquistador lo acercaron a las autoridades, que le siguieron la pista muy de cerca desde octubre hasta que fue capturado en Sinaloa el pasado viernes.
“Fue cuestión de ego tanto hacer una película, como reunirse con Kate del Castillo”, añadió el analista Hope