Noticias de Yucatán
El peligroso secuestrador Francisco Lorenzo Rosas León
alias “Comandante Paco” ya fue entregado a las autoridades que lo requerían en
la Ciudad de México.
El sujeto, que drogaba a sus víctimas e incluso las
violaba, fue enviado vía aérea luego de ser capturado en Mérida, donde trataba
de pasar inadvertido en el fraccionamiento Francisco de Montejo, de acuerdo con
información que proporcionó el fiscal general de justicia, Ariel Aldecua Kuk.
El funcionario indicó que el plagiario perteneciente a la
banda de “Los Nopaltecos” recibió el tratamiento que establecen los protocolos
de coordinación entre autoridades de distintos niveles, ya que en este caso
“Comandante Paco”, de 38 años y con domicilio en el Distrito Federal, era
buscado por autoridades federales por la índole de sus delitos.
Tras su expulsión de Yucatán, donde no cometió ningún
ilícito sino que solo se escondía, ahora su proceso queda en manos de las
autoridades que lo requerían.
El delincuente fue detenido por cometer una infracción de
tránsito cuando circulaba en una camioneta. Tras revisarse sus datos se
descubrió que tenía una orden de aprehensión vigente por secuestro. Más tarde
fue puesto a disposición de la Fiscalía General del Estado y luego se le envió
al Distrito Federal.
La aprehensión se realizó en la calle 51 con 40 del
fraccionamiento Francisco de Montejo.
Como informamos, junto con otros delincuentes Rosas León
formaba la banda de plagiarios conocida como “Los Nopaltecos”. Entre sus
funciones tenía la de interceptar a las víctimas para llevarlas a una casa de
seguridad en Nopaltepec, Estado de México.
Se menciona que para inmovilizar a sus víctimas las
drogaban utilizando escopolamina, también conocida como burundanga o la droga
de la verdad, que hace que la persona pierda la voluntad.
Hace seis años Rosas León y otros integrantes del grupo
delictivo fueron capturados en Otumba, Estado de México, por el delito de
secuestro, pero continuaron ejecutando secuestros.
De acuerdo con datos de sitios oficiales de seguridad,
“Los Nopaltecos” esperaban a sus víctimas cerca de sus casas o negocios, los
secuestraban con lujo de violencia, los sedaban y en varios casos abusaban
sexualmente de las mujeres.