Noticias de Yucatán
El próximo domingo 25 la mayoría de los mexicanos dormirá una hora más con el término del horario de verano: los relojes se atrasarán una hora y se mantendrán así por los siguientes meses.
Debido a esta disposición anual, se recomienda ajustar los relojes desde el sábado por la noche para que el domingo, día de descanso para casi todos los habitantes, las familias se despierten dentro del nuevo horario y tengan ese día para adaptarse sin tener problemas por atrasos o llegadas anticipadas al trabajo, citas u otros compromisos sociales.
Quienes laboran los fines de semana deben estar más pendientes para evitarse contratiempos.
En ciertos lugares también se pone especial cuidado al respecto. Aeropuertos, terminales de autobuses y hospitales están en esa lista.
Aunque ya transcurrieron dos décadas con esa práctica, hay personas que siguen rechazando el horario de verano porque no sienten que ahorren energía en sus hogares y centros de trabajo.
Las autoridades afirman lo contrario, incluso dan cifras de la electricidad que se deja de consumir a raíz de esa modificación y del combustible que no se utiliza para generar esa energía. Esto es gracias a que la población y el sector productivo aprovechan más la luz solar.
Asimismo, los yucatecos tuvieron que estar pendientes además del cambio que se hizo al respecto en Quintana Roo, donde desde febrero pasado rige un horario distinto, el cual quedó adelantado una hora respecto al centro del país y se igualó a los relojes del este de Estados Unidos.
Con esa modificación, Quintana Roo tiene más luz natural en verano y en invierno lo que, según se dijo en aquel entonces, beneficiará la actividad comercial del destino turístico más importante del país.
Ahora los yucatecos adelantan una hora su reloj cada vez que viajan a Cancún y otros puntos turísticos de la vecina entidad federativa.
El próximo domingo 25 la mayoría de los mexicanos dormirá una hora más con el término del horario de verano: los relojes se atrasarán una hora y se mantendrán así por los siguientes meses.
Debido a esta disposición anual, se recomienda ajustar los relojes desde el sábado por la noche para que el domingo, día de descanso para casi todos los habitantes, las familias se despierten dentro del nuevo horario y tengan ese día para adaptarse sin tener problemas por atrasos o llegadas anticipadas al trabajo, citas u otros compromisos sociales.
Quienes laboran los fines de semana deben estar más pendientes para evitarse contratiempos.
En ciertos lugares también se pone especial cuidado al respecto. Aeropuertos, terminales de autobuses y hospitales están en esa lista.
Aunque ya transcurrieron dos décadas con esa práctica, hay personas que siguen rechazando el horario de verano porque no sienten que ahorren energía en sus hogares y centros de trabajo.
Las autoridades afirman lo contrario, incluso dan cifras de la electricidad que se deja de consumir a raíz de esa modificación y del combustible que no se utiliza para generar esa energía. Esto es gracias a que la población y el sector productivo aprovechan más la luz solar.
Asimismo, los yucatecos tuvieron que estar pendientes además del cambio que se hizo al respecto en Quintana Roo, donde desde febrero pasado rige un horario distinto, el cual quedó adelantado una hora respecto al centro del país y se igualó a los relojes del este de Estados Unidos.
Con esa modificación, Quintana Roo tiene más luz natural en verano y en invierno lo que, según se dijo en aquel entonces, beneficiará la actividad comercial del destino turístico más importante del país.
Ahora los yucatecos adelantan una hora su reloj cada vez que viajan a Cancún y otros puntos turísticos de la vecina entidad federativa.