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Pese a que existen vacantes para agentes en la Policía Municipal de Mérida (PMM), contratar a un policía es “bastante difícil”, señaló Mario Arturo Romero Escalante, director de dicha corporación. La razón es que solamente 30 por ciento de los aspirantes aprueba el examen de confianza.
Entrevistado luego del banderazo de inicio del operativo decembrino de seguridad, Romero Escalante señaló que además del control de confianza, los candidatos deben tomar un curso de 900 horas y haber acreditado el bachillerato, entre otros requisitos.
“Es difícil encontrar a esos policías, o de lo contrario, encontrar civiles que cubran los requerimientos, ya que estos son cada vez más estrictos, obedeciendo al proceso de depuración de las corporaciones”, detalló.
Asimismo, explicó que actualmente la dependencia a su cargo cuenta con 435 uniformados en funciones, distribuidos en el primer cuadro de la capital del estado, y que se espera completar la cuadrilla a fin de brindar un mejor servicio a la ciudadanía.
Añadió que el control de confianza es el requisito más difícil para los aspirantes a policías municipales, sobre todo para quienes nunca han ejercido el cargo, “es ahí donde se atoran primeramente”, enfatizó.
Romero Escalante recordó que hace un par de semanas se graduó un grupo de 26 cadetes, de 82 que se registraron. Es decir, el porcentaje del grupo que aprobó el examen de confianza es apenas del 20 al 35 por ciento. “Todo el que veamos uniformado, es que ya pasó la prueba”, aseguró.
Reveló que en 2016 fueron dados de baja 12 elementos por “falta de confianza”, y en el 2017 cinco agentes fueron retirados de sus funciones por no pasar la prueba. Están a la espera de los resultados de este año y quien no cubra el requisito ya no podrá formar parte de la corporación. La Jornada Maya
