Brasil. Según el Vasco da Gama, el delantero Rildo, el portero Jordi, el volante Raul y el centrocampista Yan Sasse fueron víctimas de un asalto en la Línea Amarilla, una avenida que conecta las zonas norte y oeste de la capital fluminense.
Los delincuentes robaron el coche en el que iban los jugadores, que pertenecía a Rildo, y los teléfonos móviles de Rildo y Jordi.
Tras el asalto, los deportistas fueron ayudados por aficionados y todos se encuentran bien.
El suceso se produjo tras el partido del Vasco de Gama contra el Resende, en el estadio Maracaná, por la semifinal de la Copa Guanabara, en que finalmente el Vasco se clasificó para la final.
Tras los Juegos Olímpicos de 2016, el estado de Río de Janeiro ha registrado una ola de violencia que, según datos del Instituto de Seguridad Pública, solo en 2017 dejó 6.731 muertos.
Para afrontar la situación, el entonces presidente, Michel Temer, decretó en febrero del año pasado una intervención federal, medida que puso al Ejército en el control de la seguridad pública de Río de Janeiro hasta diciembre.
Pese a que hubo una disminución en los robos callejeros y de los robos a vehículos de carga, de acuerdo con el Observatorio de la Intervención -ONG que realizó un seguimiento de la medida-, la militarización no resolvió los problemas estructurales de violencia en la región, según grupos de defensa de los derechos humanos.
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