Algunos días después de haber viajado a una zona rural de
Río de Janeiro (Brasil), una niña de 10 años comenzó a sufrir picazón en
sus pies, donde también se le formaron pápulas, por lo que debió recibir
atención médica.
De acuerdo a RT, durante el viaje, la menor caminó
descalza por una pocilga con barro, por lo que se cree que allí fue infectada
por un parásito que le afectó a la planta de los pies y los dedos,
produciéndole dolorosas heridas con puntos negros en el centro, detalló The New
England Journal of Medicine.
La picazón que la niña padeció por diez días fue provocada
por una enfermedad cutánea llamada tungiasis, que se origina cuando el
insecto ingresa a través de la piel. Los médicos consiguieron extraerle las
conocidas como pulgas de arena de varias de las heridas.
Esos parásitos se introducen boca abajo, dejando lugar para
respirar, evacuar y expulsar sus huevos, lo que genera una hinchazón que puede
llegar a alcanzar un centímetro. Así pueden vivir entre cuatro y seis semanas
hasta que mueren, detalló la Organización Mundial de la Salud.
El organismo agregó que debido a la sobreinfección
bacteriana de las heridas, se pueden desarrollar abscesos, supuración o
linfangitis.
RT