La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación atrajo el caso del abogado Ulrich Richter Morales contra Google LLC. La compañía estadounidense apeló una sentencia en su contra que le obliga a pagar a Richter el equivalente a unos 250 millones de dólares.
El capítulo final del caso Richter vs. Google se registrará en la Suprema Corte de México. La Primera Sala determinará la validez o no de una sentencia contra Google que le obliga a pagar más de 5,000 millones de pesos al abogado Ulrich Richter Morales por daño moral y daños punitivos.
La decisión de la Primera Sala se tomó hoy con el voto a favor de 4 ministros y uno en contra para revisar una sentencia de la Sala Octava de lo Civil de la Ciudad de México contra Google Inc. (hoy Google LLC) por su responsabilidad en la creación y divulgación de un blog en la plataforma Blogger, propiedad de la compañía, que lastima los derechos a la personalidad y al honor de Richter Morales. El blog se llama “Ulrich Richter Morales y sus chingaderas a la patria”. Google apeló la sentencia.
Hasta este 15 de febrero, la Corte no había asignado número de expediente ni asignado a un ministro ponente en la Primera Sala. El número de expediente de la solicitud de atracción es el 644/2022; el del amparo de Google en el Tribunal Colegiado, 529/2022, y el del amparo presentado por Richter: AD 445/2022.
Es un caso digno del máximo tribunal: es importante, trascendente y novedoso. Una sentencia de la Primera Sala sentará un precedente sobre la responsabilidad de las plataformas digitales en el contenido que publican sus usuarios, la libertad de expresión y la aplicación de "daños punitivos” en un caso de daño moral.
Según detalles de la sentencia de la Sala Octava de lo Civil, que di a conocer en junio de 2022, la compañía con sede en California debe pagar a Richter 1,200 millones de pesos por daño moral y una cantidad similar a él, a su esposa y a la sociedad que forman Richter y su esposa por concepto daños punitivos (en total, 3,600 millones de pesos, en números cerrados).
En el blog de la discordia se afirma, sin pruebas, que Richter es investigado por la DEA, que falsifica documentos, que lava dinero. Su esposa es mencionada con memes que le hacen decir cosas que configuran supuestos ilícitos.
La sentencia también obliga a Google Inc. a pagar 700,000 pesos como indemnización mensual hasta que se cumpla la sentencia y a cubrir los daños materiales con base en la Ley Federal del Derecho de Autor por uso y explotación de la imagen y modificación dolosa de una obra.
Hablamos de unos 250 millones de dólares al tipo de cambio de la fecha de sentencia (si llegaran a pagarse, se tomará el tipo de cambio del día de la operación).
Richter Morales es un abogado mexicano con experiencia en temas de libertad de expresión y derechos relacionados con la reputación. Representó a la revista Proceso cuando Marta Sahagún, esposa del expresidente Vicente Fox Quesada, demandó a la periodista Olga Wornat, y ha defendido a TV Azteca y a Humberto Moreira Valdez, exgobernador de Coahuila. También tiene un amparo a favor del uso lúdico de la mariguana.
Un vocero de Google en México me hizo llegar esta posición de la compañía:
“Celebramos que la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación haya decidido atraer el caso”.
La resolución de la Octava Sala Civil de la Ciudad de México que condenó a Google sienta “un peligroso precedente para la libertad de expresión en el país en plataformas digitales”.
“Confiamos que el máximo tribunal constitucional de México, en apego a los criterios que de manera consistente ha emitido en la materia, protegerá la libertad de expresión y resolverá conforme a derecho”.
Richter vs. Google, de vuelta a la Corte
La decisión de la Primera Sala de la Corte significa el regreso del caso Richter vs. Google a la máxima instancia judicial de México, como parte de un litigio iniciado en 2015.
La primera vez que el caso se conoció en la Corte fue en 2017, con un proyecto de la ministra Norma Lucía Piña Hernández, hoy presidenta del tribunal. Pero días antes de la cita para revisar el asunto, Google Inc. desistió e impidió a los ministros de la Primera Sala entrar al fondo del asunto. Esto dejó en firme una resolución judicial previa que otorga competencia a los jueces mexicanos para juzgar a compañías extranjeras.
Libertad de expresión y daños punitivos
El caso Richter vs. Google también es un caso relacionado con la libertad de expresión.
El blog de la discordia, que sigue en línea desde 2014, cuando fue creado, contiene expresiones que dañan los derechos a la personalidad de Richter, pero que se encuentran bajo el control del régimen de la libertad de expresión.
Esto fue algo que la magistrada Marfa Albarrán Montaño, de la Sala Octava de lo Civil, recordó con una opinión divergente (voto particular) a la sentencia de junio de 2022 contra Google Inc.:
Nunca existió una orden judicial contra Google Inc. para eliminar el blog de la discordia, un control judicial que exige el régimen de protección de la libertad de expresión.
En ningún momento del historial Richter vs. Google se comprobó una actuación de mala fe de parte de la compañía en la creación del blog, lo que fue responsabilidad de una tercera persona ya condenada: Alejandro Gutiérrez Torres.
Albarrán también reprochó la manera de contabilizar las sanciones económicas, particularmente las relacionadas con los daños punitivos, una figura de aplicación reciente en México. Se inauguró con una sentencia en 2014 encabezada por el ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea contra el hotel Mayan Palace de Acapulco.
La idea de hacer pagar por daños punitivos es que otros posibles infractores vean la sentencia como un ejemplo disuasorio. Los daños punitivos se conocen como ejemplificativos o de retribución social.
El caso del Mayan Palace de Acapulco es muy diferente al de Richter vs. Google: en aquella ocasión se registró la muerte de un joven electrocutado en la piscina del hotel. Esta vez hablamos de intangibles como la reputación y el honor.
La Primera Sala de la Corte tiene una gran responsabilidad en la revisión del caso y su decisión tendrá impacto en la relación de plataformas digitales como Google, Instagram o TikTok sobre el contenido que publican sus usuarios y consumidores en casos que pongan en conflicto la libertad de expresión y los derechos a la personalidad.