Descartan brote de sarna en Animaya
Avanzan obras de remodelación en Animaya
La Estala Maya de Animaya, con mucha concurrencia
Alimentación especial para los animales de los zoológicos
Si alguien piensa que los animales de los zoológicos de Mérida reciben una alimentación común y corriente se equivoca.
De acuerdo con la Dirección de Servicios Públicos del Ayuntamiento, la alimentación de los animales es balanceada acorde con su edad, sexo, etapa fisiológica y, sobre todo, sus características biológicas.
Las dietas, indica la dependencia, son elaboradas con ingredientes de calidad que cubren las demandas nutricionales específicas de cada especie.
Por ejemplo, añade, los flamencos, que son aves filtradoras, consumen un alimento peletizado que flota en el agua; las jirafas, que son herbívoras, comen forraje fresco atado a una altura que se ajuste a ellas.
Aunque a muchos podría parecerles algo cruel, en la alimentación de las serpientes se utilizan ratas y ratones vivos. Siempre se ha hecho así y es algo necesario, por las características de los ofidios. Las presas son producidas en condiciones controladas en un bioterio (lugar donde se crían, mantienen y utilizan animales de laboratorio).
Ayer publicamos amplia información sobre los parques del Centenario y Animaya, que son los dos principales zoológicos de Mérida. El tercero es el de la colonia Mulsay, que tiene en exhibición menor población animal que aquéllos.
Nuestros reporteros recorrieron las instalaciones de Animaya bajo la guía de funcionarios municipales encabezados por César Bojórquez Zapata, coordinador general de Funcionamiento Urbano, y Luis Jorge Montalvo Duarte, director de Servicios Públicos Municipales.
De acuerdo con datos proporcionados en el recorrido y otros proporcionados por Servicios Públicos, los alimentos de los huéspedes de los zoológicos se dividen en los siguientes grupos:
1) Frutas y vegetales, según la temporada y disponibilidad en el mercado.
2) Carnes de pollo y de caballo para los felinos y reptiles carnívoros.
3) Presas vivas, ratas y ratones, que se producen en condiciones controladas en un bioterio de Animaya. Son para alimentar serpientes.
4) Forrajes henificados y frescos, como alfalfa, ramón, zacate taiwán, etcétera, para consumo de la mayor parte de los ejemplares que son de régimen herbívoro.
5) Cereales y concentrados, para la mayoría de los animales. Algunos son elaborados en el extranjero y unos más son concentrado de fabricación local.
En el esquema de atención se incluyen programas de desparasitación, vitaminas y vacunas según la época del año y la especie, así como de estímulos sensitivos para las especies con más alto grado de estrés.
Amenaza y riesgo
En el caso del Centenario, de las 95 especies que alberga el zoológico hay unas 35 —entre aves, reptiles y mamíferos— bajo protección especial, amenazadas o en peligro de extinción según la norma oficial respectiva.
En Animaya, las especies inquilinas en peligro de extinción son el tapir centroamericano, el mono araña, el mono aullador negro y la guacamaya escarlata.
La norma oficial indica que una especie en peligro de extinción es aquella cuya área de distribución o el tamaño de sus poblaciones en territorio nacional ha disminuido drásticamente, al grado de poner en riesgo su viabilidad biológica en todo su hábitat natural.
En Animaya también hay especies clasificadas como amenazadas, es decir, aquellas cuyas poblaciones pudieran estar, a corto o mediano plazo, en peligro de extinción si continúan los factores negativos que afectan su viabilidad.
Se considera en esa situación al flamenco rosa caribeño, el tucán real, el loro de cachetes amarillos, la boa, el cantil y la serpiente ranera.
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Publicada: 11 abril 2012
El traslado es bien recibido por los visitantes a Animaya, según el Ayuntamiento. Tal es el caso de la señora Crescencia Yepes, de Coatzacoalcos, Veracruz, quien se dijo sorprendida y agradecida con las autoridades por los servicios.
"Vinimos a visitar a unos familiares y fuimos al Centenario, pero nos sorprendimos cuando nos dijeron que estaba cerrado y que nos trasladarían de forma gratuita al otro zoológico que se llama Animaya", señaló la visitante veracruzana.
Por su parte, el señor Jesús Reyes, quien con su familia está de visita en la ciudad proveniente de Chiapas, dijo que el traslado del servicio gratuito fue cómodo y rápido, y duró 20 minutos. "Hasta ahora todo muy bien. Animaya se ve muy bonito, esperemos que así continúe", dijo.
Patricia de la Torre, también visitante pero de Veracruz, dijo que se sorprendió al saber que había transporte gratuito al centro de recreo de Ciudad Caucel.
"Nos enteramos de que había transporte sin costo y venimos a conocer Animaya. Es muy buen servicio el que se ofrece", señaló la turista.
Tema: Notas de la Comuna
La turbonada que azotó la ciudad de Mérida el 2 de abril obligó al cierre del parque.
Supervisión
Luego del rápido paso del meteoro, integrantes del Comité de Corte de Árboles del Consejo Municipal del Medio Ambiente recorrieron el Centenario para verificar los daños ecológicos.
Dictamen
Fueron 28 árboles supervisados; algunos serán replantados, otros talados por completo y otros recibirán podas completas.
Nuevo atractivo de Animaya
Regional Geographic prepotencia de Ortega
Animaya abandonado a su suerte
A pesar de que el zoológico del Bicentenario Animaya atrae cada día a mayor número de visitantes, este año no recibió ningún presupuesto para continuar su expansión.
El subdirector de Servicios Generales de Servicios Públicos Municipales, Luis Alberto Solís Pasos, informó que sólo recibió recursos para el funcionamiento operativo del parque, por lo que las innovaciones que realicen serán con base en el ingenio y la colaboración de los trabajadores e instituciones.
"A todos nos gustaría tener un zoológico de primer mundo y le pediríamos a la alcaldesa (Angélica Araujo Lara) o al Cabildo que hagan una revisión a fondo del proyecto original y destinen recursos para continuar el crecimiento de Animaya", indicó.
El parque del Bicentenario, ubicado en Ciudad Caucel, fue diseñado y construido en la administración municipal anterior, y día con día se convierte en la principal atracción del Poniente de la capital yucateca, como informamos.
Los visitantes que acuden ya demandan mayores atractivos y animales para diversificar su paseo en ese lugar.
Uno de los nuevos atractivos del parque es el entrenamiento de las aguilillas camineras Bruno y Tino, como informamos en la edición de ayer, porque si se adaptan y aprenden el sobrevuelo controlado darían un espectáculo extra en el zoológico
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Animaya sí tendría cambios
En entrevista durante la inauguración del programa de verano Educazoo, en el parque del Centenario, la alcaldesa Angélica Araujo Lara dijo que quiere hacer estas modificaciones lo más pronto posible, sin que impliquen costos elevados.
La funcionaria recordó que ya se reunió con el arquitecto Alejandro Vales García, quien hizo el proyecto del parque, para analizar los cambios que se hicieron al plan original, lo que se construyó y cómo algunas de estas variaciones afectan las condiciones del lugar, sobre todo para los visitantes.
La concejala subrayó que en este momento el objetivo es que se hagan propuestas para mejorar el proyecto con lo que tiene, “sin hacer ampliaciones, sin crecerlo, porque lo que queremos es que estas modificaciones realmente las podamos llevar a cabo pronto. Mi objetivo es que el zoológico Animaya funcione y funcione bien, con las dimensiones que actualmente tiene”.
Los cambios se harán tomando en cuenta las opiniones de los visitantes, según una encuesta.
En cuanto a la posibilidad de tener más animales, la alcaldesa dijo que más que en número, se trabaja en la posibilidad de verlos más cerca.
Sobre la venta de alimentos, Angélica Araujo recordó que el concepto de Animaya era una especie de recinto donde los mayas hubiesen estado y que los animales hicieran suyo ese espacio, de modo que la comida también tendrá que ser la adecuada.
—Los espacios para la venta de alimentos serían para cosas muy de nosotros, originales, que nos ayuden a rescatar lo que es de acá —aseguró.
Al rescate del parque zoológico de Mérida
El parque zoológico de El Centenario no cerrará sus puertas; por el contrario, se trabaja desde ahora para que recupere su antiguo esplendor y como tradicional sitio de recreo de las familias yucatecas, indicó Jorge Barrera Jure, director de Servicios Públicos Municipales.
Este zoológico, al igual que el de Mulsay, en la colonia del mismo nombre, y Animaya en Ciudad Caucel, permanecerán como sitios de recreo y serán remozados y modernizados por la comuna para que brinden el mejor servicio posible.
Este mismo año
El funcionario anunció que por ahora se realiza un estudio detallado de la situación en que se encuentran para determinar en qué áreas se trabajará de manera prioritaria este año y cuáles serán programadas en el presupuesto de 2011.
Durante un recorrido por El Centenario, Barrera Jure constató el deterioro en que se encuentran varias secciones del parque, ubicado en la confluencia de la avenida Itzaes con la calle 59, como publicamos.
El Centenario tiene estructuras comerciales destinadas para eso y si no se respetan se puede convertir en un tianguis con venta de todo tipo de productos y alimentos de los cuales no se tengan supervisión y hasta puedan ser dañinos para la salud de los visitantes, agregó.
Como informamos, en el zoológico se ven el abandono, negocios cerrados, cajas de botellas llenas de agua de lluvia, charcos en las áreas de jardines, pisos rotos por la acción de las raíces de los árboles, areneros sucios y juegos infantiles con láminas rotas y saltadas que ponen en peligro a los niños.
“Otra de las áreas en descuido es el kiosko, donde antaño se realizaban eventos culturales y de entretenimiento que luego se cambiaron a un área cercana a la pista de patinaje, dejando en el olvido ese tradicional lugar, al igual que el de la casa de los espejos que tanta diversión brindara a las familias yucatecas”, comentó Barrera Jure.
“Es por eso que se realiza un estudio detallado, para saber qué se tiene, en qué condiciones y qué falta, si son suficientes los sanitarios, las áreas de comida, las mesas en los jardines para las familias que llevan alimentos preparados, los basureros, en fin, es necesario conocer el estudio para renovar los servicios u complementarlos.
Recorrido Durante un recorrido con el director de los Servicios Públicos Municipales se observó a varios trabajadores limpiando el fondo del lago, para lo cual le sacaron el agua.
“Necesitamos un mes para inventariar, analizar y definir las acciones a emprender este año y cuáles el año que viene, pero todo esto se hará sin cerrar el parque y sin causar ninguna molestia a los visitantes, ni durante el estudio, ni durante los trabajos de remozamiento”.
Zoológicos
- En detalle Servicios Públicos Municipales realiza un estudio para saber en qué se puede mejorar el parque: Centenario El área del zoológico del Centenario tiene 900 animales de 114 especies diferentes. Bicentenario En Animaya, el zoológico del Bicentenario, hay 193 animales de 32 especies.Mulsay El zoológico de Mulsay tiene 80 animales de 10 especies
Sí se hará la segunda etapa
Cuando se le pidió su punto de vista como arquitecta sobre ese sitio, expresó: “Es muy bonito”.
Añadió que para los profesionales del ramo resulta importante y atractivo desarrollar un proyecto como ése.
Aclaró que no pretende criticar a los arquitectos que diseñaron esas instalaciones, pero considera que hay aspectos que pudieron hacerse de distinta manera y otros que están pendientes por atender.
Durante la visita la edil vio una maqueta que muestra cómo lucirá el parque cuando se termine. Además, usó el elevador para llegar al mirador de La Estela, desde donde tuvo una panorámica del parque y de otras zonas.
La alcaldesa arribó al lugar a las 12:30 horas, acompañada de varios funcionarios, entre ellos los directores de Obras Públicas y de Servicios Públicos, Antonio Duarte Briceño y Jorge Barrera Jure, respectivamente, quienes le dieron detalles sobre el funcionamiento de Animaya durante largo recorrido por la hondonada donde están las tres secciones del zoológico.
Antes de retirarse dijo que hay presupuesto para cubrir el gasto corriente de Animaya, que cuenta con 45 empleados, y para dar atención a 193 animales de 32 especies.
Lo que urge En 15 días sus colaboradores le presentarán una lista de las necesidades urgentes de Animaya, para conseguir los recursos para atenderlas. La valoración que se hará abarca tres rubros: los animales, las instalaciones y servicios del parque y, lo más importante, la seguridad, comodidad y tranquilidad de los visitantes.
—Hay carencias, pero también el compromiso de atender todo lo que hace falta al lugar —dijo.
Se “maquillaron” todas las instalaciones de Animaya para lucirlas ante la alcaldesa.
Vecinos comentaron que hasta hace poco Animaya estaba lleno de hierba, lodo en los senderos y agua verdosa en el lago artificial y alrededor de la estela maya, a lo cual, además, atribuyen la plaga de moscos en esa zona.
En un recorrido por el parque se vio a decenas de empleados cepillando los pasillos de la entrada principal, mientras otros barrían y desyerbaban el circuito y unos más reparaban lámparas dañadas.
En otra área, un grupo de jóvenes empleados extraía tierra que con ayuda de carretillas y cubetas tiraban en el encierro de las jirafas, donde había agua podrida y con excretas.
La primera etapa de Animaya aún no registra avances con la nueva administración. A la falta de sombra para los animales se suma que sus bebederos están llenos de agua verdosa, incluso con gusarapos.
Visitantes comentaron que el parque les parece un buen proyecto, pero le faltan muchos detalles. “Los avestruces se amontonan junto a las puertas, parece que quieren huir, pero lo que ocurre es que es de los pocos lugares donde tienen sombra, por eso no se mueven de ahí; esos pobres animales están sufriendo. Las autoridades deben construirles más palapas”, dijo el médico veterinario capitalino Ezequiel Sánchez Ramírez, quien llegó de vacaciones.
La familia Tamayo Chi, que llegó de Cancún, manifestó que el proyecto es muy bueno y que hay que concluirlo.
El horario del parque es de 6 de la mañana a 7 de la noche. Los lunes no abre porque se le da mantenimiento.
Ya tiene enfriadores de agua para la gente, bancas y basureros, pero todavía carece del servicio de safari.