Jacqueline Ades es una mujer estadounidense a la que se le acusa de acoso y allanamiento de morada.
Según autoridades de Arizona, Ades habría enviado 65 mil mensajes de texto a un hombre al que conoció luego de una única cita con él.
En uno de estos textos, indica la Policía, Ades amenazó con “hacer sushi con los riñones” de su víctima y “palillos con los huesos de sus manos”.
Jacqueline Ades comenzó a acosar a su víctima luego de conocerla en un sitio de citas, donde concretaron un encuentro único.
Tras conocerse, la acosadora comenzó a enviar mensajes a su víctima, aun cuando esta le había dicho que no quería volver a verla.
En julio de 2017, el hombre llamó a la Policía al ver el auto de la mujer estacionado cerca de su casa y desde entonces, esta comenzó una brutal campaña de mensajeo en su contra.
La mujer de 31 años incluso fingió ser la esposa del hombre con el fin de entrar a su lugar de trabajo, mientras que en abril de 2018, entró ilegalmente a la casa de su víctima para darse un baño.
Esa tarde, elementos de la Policía local detuvieron a la joven, quien aseguró que “en su cabeza había inventado un escenario completo en el cual vivía en la casa de su víctima, así que fue y fingió que eso era lo que estaba pasando”.
Según una declaración oficial, cuando uno de los uniformados le pidió que aclarara lo que acababa de decir, Ades comenzó a hablar de ecuaciones matemáticas relacionadas con la teoría de la relatividad de Albert Einstein.
Sin embargo, los oficiales no detuvieron a la mujer en esa ocasión, sino hasta el pasado 8 de mayo, luego de que ella se perdiera varias audiencias judiciales en su contra.
Medios de Arizona aseguran que Ades estaba convencida de que “su historia” de amor obedecía a la teoría de la relatividad que su víctima le había enseñado durante la única vez en la que estuvieron juntos.
Ades explicó que durante los últimos 16 meses, ella lo acosó porque entre más lo amaba, más “aprendía los secretos del universo”.
Ya en custodia, la acosadora ofreció disculpas por el vendaval de mensajes que envió a su víctima, y aclaró que a pesar de las amenazas que llegó a decir, “jamás le habría hecho daño”.
“No puedo creer que lo haya asustado,” reveló Ades una vez que fue interrogada por las autoridades, mismas que esperan verla el próximo 5 de febrero, fecha en la que se tiene programado un juicio en su contra.
Según medios locales, Jacqueline Ades muestra signos de una enfermedad mental.
