“Si fuera embarazo ya habría nacido el niño. Ya llevamos nueve meses de que presentamos nuestra denuncia por los muertos de Cobijar y hasta ahora no se ha sancionado a los responsables de este claro caso de corrupción”, deplora Blanca Estrada Mora, presidenta de la Federación Estatal de Colonos Urbanos de Yucatán (Fecuy).
“Denunciamos, aportamos pruebas, ampliamos nuestra denuncia, respondimos a todos los requerimientos y hasta el propio secretario de Política Comunitaria y Social, Marco Vela Reyes (responsable de Cobijar), admitió que hubo irregularidades en el manejo del programa, pero ni aún así se ha procedido”, sub- raya la ex diputada local.
“Este hecho comprueba la impunidad que reina en Yucatán, demuestra que el Instituto Estatal de Combate a la Corrupción (Inecco), que no ha resuelto ningún caso, no sirve para nada y que la gobernadora (Ivonne Ortega Pacheco) no cumple ni respeta sus propios decretos, pues fue ella la que creó a ese nuevo aparato burocrático”, apunta.
La profesora Estrada Mora presentó su denuncia por el caso Cobijar el 30 de julio de 2009 y ayer, justo al cumplirse 9 meses, acudió al Inecco a solicitar información sobre el estado que guarda su queja.
La presidenta de la Fecuy, como publicamos, denunció, con base en las listas que le dio el propio gobierno del Estado, que se repartieron miles de cobertores a supuestos beneficiarios, que resultaron ser personas solventes, familiares de funcionarios y personas fallecidas.
“No entiendo cómo Liborio Vidal Aguilar, ex secretario de Política Comunitaria y Social, en cuyo período se dieron las irregularidades de Cobijar, encara en la Cámara de Diputados al secretario de Desarrollo Social para cuestionarlo sobre el supuesto mal manejo de los programas de esa dependencia”, señala la profesora.
“¿Con qué calidad moral sale a denunciar presuntas irregularidades de la Sedesol, cuando su propio padre apareció en la lista de beneficiarios de Cobijar? “Cuando se anunció con bombo y platillo la creación del Inecco, la gobernadora afirmó que no le temblará la mano para castigar la corrupción...
Otra simulación “Al paso de los meses, otra vez sale a relucir que sólo se trató de un discurso, una mentira más, otra simulación.
“¿Para qué gasta nuestros impuestos en tinta, saliva, reflectores y fotos si sabe que no va a cumplir lo que dice? “El caso Cobijar es una vergüenza más. ¿Así serán todos los jóvenes líderes globales?, ¡pobre planeta! Impunidad, ¡cómo te quiero!”
El caso Cobijar, en la impunidad
01 mayo 2010
Noticias de Yucatán
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01/05/2010
