El notario Rubén Bolio Pastrana acudió al sitio donde se construye el "paso deprimido" a solicitud del Ayuntamiento de Mérida, en horas de la madrugada.
"Di fe de los inicios del trabajo y de la protesta de un grupo de personas, pero durante el tiempo que permanecí en ese lugar no hubo violencia", expresó el entrevistado.
Bolio Pastrana relató que fue llamado para elaborar un acta del inicio de los trabajos, concretamente para delimitar el área donde se trabajará.
"Unas personas se acostaron en el piso y los camiones no entraron", añadió el notario.
Detalló que se colocaron en determinadas áreas conos de plástico de color rojo intenso, en otras partes una alambrada.
"Todo es para evitar que las personas pasen al sitio de la construcción", expresó.
Los gritos de los inconformes se prolongaron varias horas, hasta que el notario, en común acuerdo con el director de Obras Públicas del Ayuntamiento, Antonio Duarte Briceño, se retiró cerca de las seis y media de la mañana.
El informante dijo que entre las personas que identificó está Guillermo Vela Román. El grupo aumentó conforme amanecía.
"Luego me enteré de que hubo violencia en el sitio, pero yo no estaba", añadió.
"Lo que vi fue el movimiento de los trabajadores, tanto del Ayuntamiento como de la constructora", señaló.
El acta se hizo a solicitud de la comuna meridana. En esas horas de la madrugada hubo varias interrupciones de los trabajos.- Rudesindo Ferráez García
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Un fedatario acudió, a petición del Ayuntamiento, a constatar el inicio de los trabajos en el túnel.
Acostados
Varios manifestantes, para impedir el avance de vehículos, se acostaron en el pavimento y por ese momento consiguieron su objetivo.
Cinco horas y media
De la una de la madrugada a las seis y media de la mañana un grupo de inconformes interrumpió el inicio.
¿Un millón al día?
Es el cobro de la constructora por cada jornada de trabajo.