Noticias de Yucatán
Caminaba a las 9:30 de la mañana de hoy sobre la acera de la Avenida Colón con calle 28 de Mérida cuando de la espesa maleza oí un ruido, un cuerpo se movió y estiró, pero no se levantó.
La persona se amodorró de nuevo en forma fetal y se cubrió con unas ramas de chacá. Volvió a su dulce y tranquilo sueño.
Miré entre las hierbas y vi que un sujeto dormía tirado en el suelo. La espesa maleza le sirve de cama y las ramas son sus sábanas.
El fuereño aprovechó que una residencia de la cotizada avenida meridana está abandona y con hierba crecida para hacer su dormitorio temporal o más bien su refugio a la entrada de la vivienda, con acceso fácil y bien escondido porque no es fácil su localización porque se entierra con la maleza.
Activé mi celular en video por protección y para registrar este inesperado momento por si el sujeto desconocido estaba herido o mal de la cabeza, pero resulta que es un sujeto coherente, con ropa limpia y con algunos tatuajes, de esos que te marcan en las cárceles.
Pregunté si le pasaba algo, si estaba bien.
Con el rostro cubierto dijo que sí estaba bien, que no es de Mérida y duerme en ese lugar porque no tiene casa.
Ya con la seguridad de que estaba vivo y bien, lo dejé para que continúe su descanso. No se asustó ni dejó su refugio ni mostró agresividad, simplemente duerme donde para él es un lugar seguro.
Caminaba a las 9:30 de la mañana de hoy sobre la acera de la Avenida Colón con calle 28 de Mérida cuando de la espesa maleza oí un ruido, un cuerpo se movió y estiró, pero no se levantó.
La persona se amodorró de nuevo en forma fetal y se cubrió con unas ramas de chacá. Volvió a su dulce y tranquilo sueño.
Miré entre las hierbas y vi que un sujeto dormía tirado en el suelo. La espesa maleza le sirve de cama y las ramas son sus sábanas.
El fuereño aprovechó que una residencia de la cotizada avenida meridana está abandona y con hierba crecida para hacer su dormitorio temporal o más bien su refugio a la entrada de la vivienda, con acceso fácil y bien escondido porque no es fácil su localización porque se entierra con la maleza.
Activé mi celular en video por protección y para registrar este inesperado momento por si el sujeto desconocido estaba herido o mal de la cabeza, pero resulta que es un sujeto coherente, con ropa limpia y con algunos tatuajes, de esos que te marcan en las cárceles.
Pregunté si le pasaba algo, si estaba bien.
Con el rostro cubierto dijo que sí estaba bien, que no es de Mérida y duerme en ese lugar porque no tiene casa.
Ya con la seguridad de que estaba vivo y bien, lo dejé para que continúe su descanso. No se asustó ni dejó su refugio ni mostró agresividad, simplemente duerme donde para él es un lugar seguro.