La
aplicación de mensajería WhatsApp puede generar adicción y el usuario podría
pasar muchas horas frente a una de las herramientas de comunicación móvil más
utilizadas en el mundo con la que se llegan a envíar 60 millones de mensajes
diariamente.
De acuerdo
a Erika Villavicencio Ayub, coordinadora de Psicología Organizacional de la
Facultad de Psicología de la UNAM, existe una discusión sobre si esta aplicación
podría generar adicción.
La
especualista indicó para UNAM Global que actualmente esta adicción no se
encuentra contemplada en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos
Mentales (DSM-5), pero que podría tratarse de una adicción a las Tecnologías de
la Información.
La
especialista indicó que existen indicadores que alertan sobre una posible
adicción a WhatsApp:
Dedicar
tiempo excesivo a su uso
Mentir
sobre el tiempo que se usa
Sentir
vibraciones fantasmas de mensajes recibidos
Descuido de
la apariencia personal
Descuidar
horas de sueño, alimentación y relaciones interpersonales
Bajo
rendimiento en escuela o trabajo
Ansiedad
cuando la batería del móvil se agota o se queda sin señal
¿Qué hacer?
La
especialista destacó que se debe hacer un diagnóstico para otorgar un
tratamiento adecuado en todos los casos de adicción a las tecnologías de la
información, agregó que en las fases iniciales se puede otorgar terapia
cognitivo-conductual y en caso de etapas avanzadas se opta por tratamiento
farmacológico.
Por último
dijo que las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) son parte de
la vida cotidiana y no se pretende luchar a contracorriente, pero sí se deben
de usar de forma correcta para que no afecten la salud de los individuos.