Pese a que fueron detenidos con mariguana, Florencio Villasís de la Rosa y Jesús Humberto Paredes Quiñones no se quedarán en la cárcel, pues se les concedieron concesiones a cambio de que se ‘porten bien’. Ambos fueron beneficiados con la suspensión a condición a proceso, ya que se comprometieron a cumplir varias condiciones, como el no drogarse durante ocho meses.
A ellos se les sigue proceso por delitos contra la salud, en su modalidad de narcomenudeo, en su variante de posesión con fines de suministro del narcótico denominado cannabis o mariguana.
Están bajo las determinaciones de la juez de control Suemy del Rosario Díaz, quien no concedió la prisión preventiva al considerar que los imputados tienen un nivel medio de peligrosidad, además que el delito no es considerado grave, ya que el código de procedimientos penales federal se encuentra derogado a partir del 22 de septiembre pasado.
La juzgadora tampoco accedió a que se le colocarán localizadores electrónicos, pues considera estigmatiza a los imputados. Entre las condiciones que deben cumplir ambos están el residir en un lugar determinado, abstenerse de consumir drogas, tener un trabajo y no viajar al extranjero, todo ello por un plazo de ocho meses, periodo que concluye el 11 de septiembre de 2016. Ambos deberán acudir en los primeros cinco días de cada mes para confirmar que cumplieron lo establecido en el acuerdo.
Los hechos ocurrieron en el fraccionamiento Juan Pablo II, sección Cardenales, donde ambos sujetos se encontraban caminando sobre la calle 38, y al observar a unos agentes de seguridad estatal que realizaban su ronda, se pusieron nerviosos y pretendieron huir. Tras practicarles una revisión, a los sujetos se les localizaron varios envoltorios con hierba seca, por lo que se procedió a su detención
A ellos se les sigue proceso por delitos contra la salud, en su modalidad de narcomenudeo, en su variante de posesión con fines de suministro del narcótico denominado cannabis o mariguana.
Están bajo las determinaciones de la juez de control Suemy del Rosario Díaz, quien no concedió la prisión preventiva al considerar que los imputados tienen un nivel medio de peligrosidad, además que el delito no es considerado grave, ya que el código de procedimientos penales federal se encuentra derogado a partir del 22 de septiembre pasado.
La juzgadora tampoco accedió a que se le colocarán localizadores electrónicos, pues considera estigmatiza a los imputados. Entre las condiciones que deben cumplir ambos están el residir en un lugar determinado, abstenerse de consumir drogas, tener un trabajo y no viajar al extranjero, todo ello por un plazo de ocho meses, periodo que concluye el 11 de septiembre de 2016. Ambos deberán acudir en los primeros cinco días de cada mes para confirmar que cumplieron lo establecido en el acuerdo.
Los hechos ocurrieron en el fraccionamiento Juan Pablo II, sección Cardenales, donde ambos sujetos se encontraban caminando sobre la calle 38, y al observar a unos agentes de seguridad estatal que realizaban su ronda, se pusieron nerviosos y pretendieron huir. Tras practicarles una revisión, a los sujetos se les localizaron varios envoltorios con hierba seca, por lo que se procedió a su detención