Los conocidos y muy queridos personajes comerciales que
durante décadas han alegrado a chicos y grandes han comenzado a desaparecer
dentro de una nueva política nacional para promover una mejor alimentación.
Esto debido a que el país atraviesa por una crisis
nutricional, donde por ejemplo la diabetes es una de las principales causas de
muerte, al mismo tiempo que México está entre las naciones con peores índices
de obesidad infantil.
Y ahora tristemente toca el turno de irse a los emblemáticos
Globito y Bizcochito, nacidos en la empresa galletera yucateca Dondé.
En alguna época incluso se transmitían anuncios comerciales
musicales en los que ambos personajes entonaban una canción que muchos se
aprendieron fácilmente.
“Yo soy Globito, compañero de Bizcochito, y soy redondito…”,
se escuchaba.
Ahora ambos personas desaparecerán gradualmente de los
empaques como parte de la modificación de la Norma Oficial Mexicana 51, que
regula el sistema de etiquetado frontal que deben tener todos los alimentos y
bebidas no alcohólicas preenvasados.
Dicha norma prohíbe que los productos con uno o más sellos
de advertencia sobre alto contenido de azúcar, sodio o grasa contengan
personajes que, al estar dirigidos a consumidores menores de edad, los
promuevan o fomenten.
Otros productos en los que ha desaparecido los personajes
son Pingüinos, Chetos, Mamut, el osito Bimbo, entre otros.
Comida chatarra genera obesidad entre yucatecos
Hay que señalar que la obesidad y el sobrepeso están
presentes en gran porcentaje de la población yucateca, lo que trae como
consecuencia, entre otros problemas, la prevalencia de enfermedades crónicas,
en especial diabetes e hipertensión.
Hasta el 5 de septiembre del 2020 se tiene el registro de
cuatro mil 865 casos de hipertensión arterial (dos mil 219 hombres y dos mil
646 mujeres) y tres mil 283 de diabetes mellitus tipo 2 (mil 501 hombres y mil
782 mujeres).
En este contexto, desde octubre pasado comenzó a realizarse
un nuevo etiquetado, principalmente en alimentos y bebidas altos en calorías,
grasas saturadas, sodio o azúcar.
Por ello también, muchos productos continuarán prescindiendo
de sus principales personajes.