—Para ellos ésa es la receta: nunca te acerques a la gente, sólo genera una imagen para impresionarla —agregó.
También expuso que una característica del líder auténtico es que vive en casa de cristal, es transparente en sus actos, hay congruencia entre lo que dice y lo que hace.
César Isunza es licenciado en teología, se graduó en el Seminario Teológico Bautista Mexicano. Fue rector del campus que tiene en México la Universidad de Liderazgo de la iglesia evangélica Willow Creek, una de las que tiene mayor influencia en Estados Unidos actualmente.
Es casado, tiene 3 hijos y se especializa en temas de liderazgo, que imparte en varias partes del mundo como México, Colombia, Guatemala, Cuba, Puerto Rico, Venezuela, Colombia y Estados Unidos. Uno de sus cuatro libros se denomina Liderazgo Peligroso.
César Isunza estuvo en esta ciudad invitado por el gobierno del Estado para impartir una conferencia en el Instituto para la Inovación, Calidad y Competitividad. Asistieron empleados del propio gobieno estatal y de varias empresas.
El visitante dijo que todo líder auténtico es un peligro para lo que anda mal en la sociedad, pues promueve la unidad, combate la división, impulsa a nuevos líderes y es leal, íntegro, positivo y sensible a las necesidades de los demás. Su influencia rechaza la manipulación y la hipocresía. “Los guías sociales deben tener dos elementos para hacer una tarea positiva: poder y sentido de responsabilidad. Si sólo tienen poder entonces se convierten en caciques, y si cuentan únicamente con el sentido de responsabilidad entonces no pueden cambiar las cosas”. “Un error común es poner mucho entusiasmo en una tarea aunque el barco haya perdido el rumbo”, señaló.
El mexicano, dijo, considera que basta “echarle ganas” para conseguir la meta que se persigue. Eso no es suficiente, hay que capacitarse para tener las herramientas adecuadas para ello.