Noticias de Yucatán. Noticias de Hoy
Los poros son la salida natural de las glándulas sebáceas al exterior, a través de la que el cuerpo elimina toxinas y otras sustancias con ayuda del sudor. Las causas de que estas salidas se muestren más dilatadas de lo normal son variadas y debe determinarlas un dermatólogo: cambios hormonales, adolescencia, acné, calor o humedad en el ambiente o el uso de determinados medicamentos pueden favorecer este aspecto más abierto. Aunque es algo más común entre los hombres, los poros dilatados son una consulta muy frecuente sobre todo entre las mujeres.
Todos los tratamientos disponibles pueden mejorar el aspecto, pero es cierto que, con el tiempo, los poros pueden volver a tener la misma apariencia que al principio.
Existen diferentes tipos. El primero, el más fácil y suave, consiste en aplicar crema con retinol en la zona. Estos productos pueden adquirirse directamente en farmacias sin necesidad de prescripción, pues contienen una concentración de retinol muy baja, pero suficiente para alisar la superficie de la piel: al estar más lisa y más tersa, los poros también parecerán más cerrados.
Hay productos un poco más fuertes, que deben estar pautados por un dermatólogo, y que contienen retinoides que tienen una acción de alisado más potente. Además, se pueden tomar retinoides por vía oral, pero durante un periodo limitado de tiempo.
Otro paso más es el láser que, al destruir la capa córnea —la capa superficial de la piel—, hace que esa sensación de poro dilatado sea mucho menor.
Con los productos tópicos hay que ser constante y, si optamos por el láser, hay que repetir el procedimiento periódicamente porque generan mejoría, pero con el tiempo y por la tendencia genética de cada persona, los poros dilatados vuelven a aparecer.
Fuente: El País
Los poros son la salida natural de las glándulas sebáceas al exterior, a través de la que el cuerpo elimina toxinas y otras sustancias con ayuda del sudor. Las causas de que estas salidas se muestren más dilatadas de lo normal son variadas y debe determinarlas un dermatólogo: cambios hormonales, adolescencia, acné, calor o humedad en el ambiente o el uso de determinados medicamentos pueden favorecer este aspecto más abierto. Aunque es algo más común entre los hombres, los poros dilatados son una consulta muy frecuente sobre todo entre las mujeres.
Todos los tratamientos disponibles pueden mejorar el aspecto, pero es cierto que, con el tiempo, los poros pueden volver a tener la misma apariencia que al principio.
Existen diferentes tipos. El primero, el más fácil y suave, consiste en aplicar crema con retinol en la zona. Estos productos pueden adquirirse directamente en farmacias sin necesidad de prescripción, pues contienen una concentración de retinol muy baja, pero suficiente para alisar la superficie de la piel: al estar más lisa y más tersa, los poros también parecerán más cerrados.
Hay productos un poco más fuertes, que deben estar pautados por un dermatólogo, y que contienen retinoides que tienen una acción de alisado más potente. Además, se pueden tomar retinoides por vía oral, pero durante un periodo limitado de tiempo.
Otro paso más es el láser que, al destruir la capa córnea —la capa superficial de la piel—, hace que esa sensación de poro dilatado sea mucho menor.
Con los productos tópicos hay que ser constante y, si optamos por el láser, hay que repetir el procedimiento periódicamente porque generan mejoría, pero con el tiempo y por la tendencia genética de cada persona, los poros dilatados vuelven a aparecer.
Fuente: El País