Expresamos nuestro rechazo y condena toda vez que:
1. Violenta las normas internas y el reglamento recientemente reformado que rige el adecuado desarrollo de las sesiones.
2. El hecho constituye no sólo un agravio a la institución presidencial que merece todo el respeto de los mexicanos, y de la que el Partido Acción Nacional siempre ha sido y será respetuosa, sin importar su origen partidario, sino un agravio al conjunto de las instituciones del país. Rechazamos la denostación al Ejecutivo Federal y señalamos, que así como la censura es enemiga de la libertad de expresión, también lo son la calumnia y la difamación.
3. Constituye un acto de autodenigración de los propios legisladores, particularmente de aquellos que lo provocaron del Partido del Trabajo y algunos del PRD. Es una acción sin precedente que no podemos consentir dada la responsabilidad que nos fue dada por nuestros electores.
4. El Grupo Parlamentario de Acción Nacional hace un llamado a los integrantes de la LXI Legislatura a que honremos la encomienda de la sociedad que tenemos con una responsabilidad. Los integrantes del Congreso de la Unión tenemos hoy la ineludible tarea de trabajar por el bien de México.
El Congreso no puede ser rehén de la calumnia ni de la difamación ni tampoco de los intereses y agravios de unos cuantos.
No podemos permitir la impunidad que se protege en el fuero y en la tarea legislativa.
A nombre de todo mi Grupo Parlamentario refrendamos nuestro apoyo, respaldo y respeto al señor presidente de la República, Felipe Calderón y, particularmente, lamentamos y condenamos el daño que se provoca a la vida institucional del país.
Esto es lo que queremos transmitir hoy a todo el país y, por lo tanto, aprecio mucho que se a través de los medios de comunicación y de la defensa de la libertad de expresión, como nos permitan hacerlo llegar a millones de mexicanos.