Taxista mata pero reparará el daño con impuestos de todos

En procedimiento abreviado, el taxista Ernesto Tzuc Can, quien mató a un motociclista el 3 de agosto de 2013, fue encontrado responsable del delito de homicidio y daño en propiedad ajena cometidos por culpa.
El chofer fue condenado a un año y seis meses de prisión y al pago de un millón 227 mil 600 pesos en concepto de reparación del daño por la indemnización del homicidio por culpa.
Como la sanción económica le es prácticamente imposible pagarla al taxista, la familia de la víctima podría quedarse sin recibir nada.
Una posibilidad para el pago de dicha cantidad es por medio de un fondo especial para la atención de víctimas, proveniente de los impuestos de todos los ciudadanos.
En la explicación de la sentencia, se le impuso una multa de nueve días de salario mínimo, se le condenó al pago de tres mil 682 pesos por gastos funerarios y al pago de siete mil pesos como reparación del daño por el delito de daño en propiedad ajena.
La Fiscalía General del Estado solicitó también que al acusado se le suspendan sus derechos políticos electorales y se le amoneste a afecto de que no reincida.
El caso asentado en la causa penal señala al taxista como responsable de la muerte de José Wilberth Hu Huchim, a quien atropelló con el vehículo Ford placas 65­76­YSB, que funcionaba como trasporte público y es propiedad de su hermano Raúl.
Los hechos se registraron el 3 de agosto del 2013 en la carretera Santo DomingoKochol, Maxcanú, cuando el conductor del transporte público invadió el carril contrario de circulación y colisionó con su parte frontal la motocicleta conducida por José Wilberth.