Recordó que a los 12 años ya era una adolescente con curvas y personas cercanas le advirtieron sobre la imagen que proyectaba.
“Cuando tenía 15, los adultos en mi vida estaban preocupados por modelar tan joven… Maestros, amigos, adultos, novios, individuos que no estaban regulados como aquellos altamente examinados del mundo de la moda eran los que con más frecuencia me hacían sentir incómoda o culpable acerca de mi sexualidad en desarrollo”, explicó Emily.
“Aún estaba descifrando cómo ponerme un tampón, olvidando cómo entender algunos de los aspectos más complicados de la femineidad, y todas estas interacciones me hacían sentir como que me estaba perdiendo algo del mundo”, añadió.
Emily contó que suele ver su cuerpo desnudo en todos los espejos de los lugares donde ha vivido y mientras se prepara, escucha voces que le recuerdan no enviar el mensaje incorrecto.
“Y ¿cuál es ese mensaje exactamente? La implicación es que ser sexual es ser basura porque ser sexual significa jugar en los deseos de los hombres. Para mí, ‘sexy’ es un tipo de belleza, de autoexpresión, una para ser celebrada, una que es maravillosamente femenina. ¿Por qué la implicación tiene que ser que el sexo es una cosa que los hombres toman de las mujeres y las mujeres se sacrifican?”
Muchas adolescentes son introducidas a las mujeres ‘sexy’ a través de pornografía o imágenes de celebridades con photoshop.
¿Es el único ejemplo de una mujer sexual que daremos a las jóvenes de nuestra cultura?… Incluso si ser sexualizada por la mirada de la sociedad es degradante, debe haber un espacio donde las mujeres puedan ser sexuales cuando lo decidan”, explicó la modelo.Emily aseguró que se rehúsa a vivir en un mundo de “vergüenza y disculpas en silencio”.
