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El mundo del boxeo no sabía hasta hace un par de meses quién era Jaime Munguía, pero ahora ya sabe hasta de lo que es capaz.
El orgullo de Tijuana, México, logró la noche del viernes un brutal nocaut sobre Sadam Ali en el Turning Stone Casino de Verona, Nueva York, para conquistar, apenas a los 21 años, el campeonato Superwelter de la Organización Mundial de Boxeo.
Munguía, quien hace un mes recibió el rechazo de la Comisión Atlética de Nevada para pelear con Gennady Golovkin el 5 de mayo en las 160 libras, hizo el ruido suficiente para obtener esta oportunidad en las 154 libras y demostró ser toda una bestia al derribar en cuatro ocasiones al ahora ex campeón.
“La verdad, esto significa algo muy grande para mí, esto es un sueño para todo boxeador, pero apenas esto empieza”, afirmó Munguía, promovido por Fernando Beltrán de Zanfer, al final del explosivo desenlace.
“Gracias a la Comisión de Nevada. Gracias a ellos no peleé con Gennady Golovkin, pero me dieron esta oportunidad y ahora soy campeón del mundo”, destacó el púgil mexicano.
En la batalla, Munguía mandó dos veces a la lona a Ali, quien, sorprendido, no encontraba el equilibrio en el ring, primero, tras un poderoso gancho de izquierda y luego un cruzado de derecha. En el segundo round, una derecha del tijuanense volvió a derribar a Sadam y aunque no hubo caída en el tercer asalto, en el cuarto bastó un gancho espectacular a la mandíbula para enviarle por cuarta vez a la lona y obligar al réferi a detener el pleito al 1:08 minutos del cuarto capítulo, pues ya ni le contó.
“Quería esta pelea, me estaba preparando para Liam Smith, pero no se hizo la pelea y llegó Munguía. Era el campeón y debía tomar el reto, pero (Jaime) es un muchacho muy fuerte y me conectó temprano”, reconoció Ali, quien en diciembre pasado había destronado al boricua Miguel Cotto.
Con sus 21 años, Munguía se convirtió en uno de los campeones más jóvenes en la historia del boxeo mexicano y al hacerlo, mejoró su récord a 29-0 y 25 nocauts. Además, dejó huella en su debut en las grandes ligas.
Por su lado, Ali dejó su márca en 26-2 y 14 nocauts. (ESPN).
El mundo del boxeo no sabía hasta hace un par de meses quién era Jaime Munguía, pero ahora ya sabe hasta de lo que es capaz.
El orgullo de Tijuana, México, logró la noche del viernes un brutal nocaut sobre Sadam Ali en el Turning Stone Casino de Verona, Nueva York, para conquistar, apenas a los 21 años, el campeonato Superwelter de la Organización Mundial de Boxeo.
Munguía, quien hace un mes recibió el rechazo de la Comisión Atlética de Nevada para pelear con Gennady Golovkin el 5 de mayo en las 160 libras, hizo el ruido suficiente para obtener esta oportunidad en las 154 libras y demostró ser toda una bestia al derribar en cuatro ocasiones al ahora ex campeón.
“La verdad, esto significa algo muy grande para mí, esto es un sueño para todo boxeador, pero apenas esto empieza”, afirmó Munguía, promovido por Fernando Beltrán de Zanfer, al final del explosivo desenlace.
“Gracias a la Comisión de Nevada. Gracias a ellos no peleé con Gennady Golovkin, pero me dieron esta oportunidad y ahora soy campeón del mundo”, destacó el púgil mexicano.
En la batalla, Munguía mandó dos veces a la lona a Ali, quien, sorprendido, no encontraba el equilibrio en el ring, primero, tras un poderoso gancho de izquierda y luego un cruzado de derecha. En el segundo round, una derecha del tijuanense volvió a derribar a Sadam y aunque no hubo caída en el tercer asalto, en el cuarto bastó un gancho espectacular a la mandíbula para enviarle por cuarta vez a la lona y obligar al réferi a detener el pleito al 1:08 minutos del cuarto capítulo, pues ya ni le contó.
“Quería esta pelea, me estaba preparando para Liam Smith, pero no se hizo la pelea y llegó Munguía. Era el campeón y debía tomar el reto, pero (Jaime) es un muchacho muy fuerte y me conectó temprano”, reconoció Ali, quien en diciembre pasado había destronado al boricua Miguel Cotto.
Con sus 21 años, Munguía se convirtió en uno de los campeones más jóvenes en la historia del boxeo mexicano y al hacerlo, mejoró su récord a 29-0 y 25 nocauts. Además, dejó huella en su debut en las grandes ligas.
Por su lado, Ali dejó su márca en 26-2 y 14 nocauts. (ESPN).