CHINA.- Las
travesuras de los niños y jóvenes ya están avanzando a un grado más alto y
peligroso, como es el caso de un joven de 13 años originario de la
ciudad de Dongguan, China, quien decidió introducirse un cable de 70
centímetros el cual se le atoró en la vejiga durante tres meses, pues el
joven quería saber de dónde venía la orina.
El joven fue trasladado a un hospital luego de que comenzara a orinar sangre, por lo que tuvo que confesarle a los médicos que se había introducido dicho objeto de metal por el pene porque quería saber de dónde venía la orina.
El joven no
sintió ningún tipo de dolor al introducir el objeto por lo que no se
preocupó, además de que le daba vergüenza que sus padres se enteraran. Los
médicos al realizarle la radiografía quedaron impactados con el resultado de
esta pues se veía claramente el objeto alojado en dicho sitio.
El joven fue intervenido en una operación de aproximadamente una hora en la que le retiraron con éxito el objeto de la vejiga, dejando más que sorprendidos a los médicos que no sabían que era posible que un objeto de ese largo pudiera entrar por la uretra, menos de un joven de su edad.
Más casos de
objetos en genitales
Hace algunos meses
atrás se presentó el caso de un niño de 10 años que se introdujo un
cable de la misma manera, pero este tenía una medida de 5 pies, lo más
sorprendente es que el objeto duró dentro del pequeño 5 años.
En China se
registran alrededor de 20 a 30 casos de este tipo, por eso los médicos
piden a los padres advertirles sobre el peligro de insertar objetos en sus
genitales y otras partes del cuerpo.