El delegado de la Sagarpa, Gerardo Escaroz Soler, califica de lamentable que el gobierno del Estado no haya considerado en su presupuesto de este año el Proyecto Estratégico para la Seguridad Alimentaria (Pesa) de la FAO, a pesar de que sí recibió los recursos que le corresponden a la Federación.
"Como Sagarpa hemos visto que el programa ha dado buenos resultados desde 2003. Muchas familias han avanzado con sus proyectos y se han superado", añade.
Pedro Cabrera Quijano, presidente de la Fundación Produce Yucatán, subraya que este caso es una muestra de los continuos intentos del gobierno del Estado de apropiarse del dinerofederal y no canalizarlo a sus fines originales."Aquí está claro: quieren tranzar el dinero para formar su cochinito electoral y, de paso, enriquecer más a algunos funcionarios", apunta. "Seguramente veremos pronto proyectos fantasmas, facturas falsas y otros esquemas con los que tratarán de justificar el uso de los recursos".
"Les están escamoteando los recursos a las agencias de desarrollo rural que trabajan en el programa de la misma forma en que lo hicieron a la Fundación Produce, a la que le adeudan dinero de 2010".Cabrera Quijano exhorta a partidos políticos y agrupaciones civiles a pronunciarse sobre este "burdo intento de robar el dinero federal", que deja al descubierto "una cofradía de la impunidad".
"En el caso del programa Pesa, esta cofradía atenta contra los más pobres", agrega.
En otra entrevista, Escaroz Soler confirma que el gobierno federal cumplió con entregar el 75% de los $11 millones que se habían considerado para el programa este año. Fueron cuatro envíos: el primero, en abril.
También ratifica que el dinero no viene etiquetado y, por lo tanto, puede ser reasignado a rubros diferentes. Además, no es sujeto de devolución, de tal forma que el gobierno del Estado lo puede seguir manejando.
"Al no estar etiquetado se le puede poner en ganadería, en pesca o en otra rama", precisa.Cuando se le hace notar que esta situación podría dar pie a desvíos, el delegado apunta que debe imponerse la voluntad política, "creer en el proyecto exitoso y darle los recursos".
"Desde luego, se puede desviar el dinero hacia otros componentes, hablando de un desvío en el buen sentido. Como dije antes, se puede decidir no darlo a un proyecto del Pesa y sí canalizarlo a otro de ganadería o pesca, por ejemplo".
No obstante, añade que se está a tiempo de una "reconsideración" en el programa en Yucatán, aunque para ello también se necesita voluntad política."Las reglas establecen que hasta finales de septiembre se puede hacer una reprogramación, un cambio de programa a programa, y existe la posibilidad de que el gobierno reasigne recursos al Pesa".- Angel Noh Estrada
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