Noticias de Yucatán
El empresario Enrique Romero Hercila interpuso ante la Fiscalía General del Estado una denuncia penal por la sustracción de más de $108,000 de sus cuentas bancarias en junio pasado.
Lleva más de dos meses de trámites, reclamaciones y reforzando la denuncia número 1590/2015 ante la Agencia Mixta Uno de la Fiscalía, pero no rinden frutos sus gestiones. Incluso, el afectado pidió la intervención de la Comisión Nacional para la Protección de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) para recuperar sus ahorros, pero tampoco tiene respuesta favorable.
Romero Hercila entregó al Diario copia de su denuncia en la Fiscalía, de la queja ante la Condusef y la carta del movimiento y postura del banco donde tenía sus ahorros.
El cuentahabiente bancario relata que vive una situación de impotencia porque no sólo le robaron $108,800 de sus ahorros, sino que tendrá que pagar el impuesto fiscal por ese retiro ilegal que no autorizó.
Dice que los ladrones cibernéticos aprovecharon una falla del banco para sustraer esa cantidad de dinero “porque los ejecutivos no actuaron con rapidez ni protegieron sus ahorros”. Con la información que ya obtuvo y el deslinde que hizo el banco, ahora sospecha que empleados del sistema bancario forman parte de esta red de ladrones de cuentas bancarias, un delito que aumenta y nadie resuelve.
La sospecha del afectado de que el sistema bancario está coludido con esta red de ciber delincuentes es porque la transacción se hizo de su banco a otro, crearon una cuenta con mucha facilidad y la cancelaron el mismo día, una vez que retiraron sus ahorros bancarios.
“Si personalmente cuando abres una cuenta te piden muchos papeles, identificación y otras cosas, no puede ser que abran y cancelen una cuenta tan fácilmente”, dijo en una entrevista para relatar su caso.
El banco ya informó que no se puede hacer responsable de esa cantidad sustraída ilegalmente porque él proporcionó sus números confidenciales. Sin embargo, Romero Hercila consideró que el banco es responsable porque es su página digital, siempre sale una contra pantalla que pide información y por ello no sospecharon de que harían mal uso de sus números confidenciales de sus cuentas bancarias.
El robo de dinero en la cuenta bancaria de Enrique Romero Hercila ocurrió el 22 de junio pasado.
La contadora que maneja sus cuentas bancarias, con su autorización, quiso realizar unas operaciones ese día, pero el portal bancario, como era costumbre, apareció una leyenda de actualizaciones y solicitó su contraseña para acceder. Como pasaba con frecuencia sin ninguna consecuencia no le pareció extraño. Es que así tecleó su “token” y aportó el número de sus tarjetas del banco. Enseguida apareció como cuenta bloqueada.
El 23 de junio fue a una sucursal y, tras reportar el bloqueo, le hicieron un nuevo “token”, luego de las llamadas al 01800 del banco. Sin embargo, su cuenta siguió bloqueada y le informaron que alguien le dio de alta a un “super token” manejado desde un celular y había hecho movimientos. El día 24 de junio, luego de nuevos trámites en el banco, le crearon otro “token” y pudo comprobar que le sustrajeron diversas cantidades de dinero, tanto de su cuenta, como a la de su esposa porque es co-titular.
En su denuncia penal en la Agencia Mixta Uno, Romero Hercila reportó el retiro ilegal de las siguientes cantidades: $23,500, $24,500, $13,500, mismas que fueron transferidas a una cuenta a nombre de Jesús Castro Flores, de otro banco. En la cuenta de su esposa el ciber ladrón transfirió $7,000, $7,000 y $8,800 a su cuenta y luego lo retiró y transfirió a su misma cuenta.
Una ejecutiva de su banco, que lo asesoró, se negó a proporcionar el número de cuenta del recipiendario del dinero del otro banco. Por ello cree que el sistema bancario está coludido en estos robos cibernéticos. Megamedia.