La regidora panista Lizette Mimenza Herrera manifestó que hay actas de reuniones con palabras que no pronunció, lo que pidió que se corrija, pues “se pierde la esencia de lo que se dijo”.
Además, señaló que se abusa de las sesiones extraordinarias, “que son para tratar temas urgentes y no para desahogar asuntos como los que se han presentado, que se pudieron incluir en las ordinarias”.
Los regidores del PRI Humberto Hevia Jiménez, Omar Lara Pacheco, Ricardo Béjar Herrera, Daniel Granja Peniche, Jorge Sobrino Argáez y Julio Ávila Novelo, y la síndico, Elizabeth Vargas Aguilar, dijeron que es necesario estar disponibles para atender los asuntos necesarios.
En la sesión de ayer el Cabildo atendió el tema de instalación de las seis comisiones permanentes y las 18 especiales, con sus integrantes y presidentes. En el siguiente tema se puso a consideración de los regidores la lectura y aprobación de las actas de las sesiones extraordinarias del 21 y 23 de julio.
El regidor Manuel Ávila hizo tres propuestas: establecer la dirección de asuntos religiosos, acercar los servicios a los ciudadanos de colonias y comisarías y que se siga atendiendo a los ciudadanos de forma directa.
En entrevista posterior, Santiago Altamirano Escalante, secretario de la Comuna, dijo que la actitud de algunos regidores de Acción Nacional se entiende como un tema político, pero hay otros que intervienen con temas propositivos que generan beneficios para los meridanos.
—La cuestión de las actas se convierte en tema político derivado de una percepción. Cuando se someten a consideración de los regidores se entiende que las leyeron y que si hubiera algún comentario lo deberían hacer en la sesión. Entonces, ¿por qué se aprobaron y por qué se firmaron? si lo hicieron se entiende que están de acuerdo con lo que se planteó —concluyó.